Una solución sostenible
La legislación ambiental vigente en España obliga a la estabilización de los lodos de forma que se reduzca su poder de fermentación, que imposibilita su uso agrícola sin recibir un tratamiento previo, que puede realizarse por vía biológica, química, térmica, o mediante el simple almacenamiento a largo plazo.
El tratamiento anaeróbico de los lodos destaca como la solución más sostenible tanto desde el punto de vista medioambiental como económico debido a su capacidad de reducir la producción de fangos, ya que una parte se convierte de forma natural en biogás, que puede ser valorizado energéticamente.
El coste asociado a su gestión es menor que el que presentan otras soluciones ya que a una mejor valorización de los lodos resultantes debe añadirse una reducción de la huella de carbono, es decir, de las emisiones de gases que producen el efecto invernadero, en las operaciones de acondicionamiento y gestión de los lodos.