La mitad de las actividades laborales actuales podrían ser automatizadas en el año 2055.
La automatización introduce cambios en el mercado laboral a los que el trabajador se verá obligado a adaptarse con más formación
La cuarta revolución industrial está modificando el mercado laboral, las profesiones y la forma de trabajar. Impulsa nuevas ocupaciones –como piloto de drones, experto en redes neuronales o diseñador de órganos con impresión 3D–, pero también modifica o elimina el contenido de otras. "Observamos un cambio: hoy ya no es necesario invertir tiempo en tareas mecánicas, como la búsqueda de datos o información, y debemos invertirlo en el análisis de estos datos, la reflexión, conocer su impacto... Por consiguiente, la parte reflexiva se impone a la operativa", explica Carlos Obeso, profesor del Departamento de Dirección de Personas y Organización de Esade.
Este cambio fundamental afecta con mayor o menor énfasis a la gran mayoría de profesiones, y está provocando el surgimiento de nuevas ocupaciones
CARLOS OBESO, ESADE “Las profesiones cambian y la parte reflexiva, de análisis, se impone a la operativa” hasta ahora inimaginables, como la de terapeuta de empatía artificial o arquitecto de nuevas realidades.
COMERCIALES Y ATENCIÓN AL CLIENTE
No obstante, Obeso destaca que, "cuando hablamos del futuro del trabajo, no debemos olvidar la realidad, el día a día, y donde está la demanda más importante no es en nanorobótica o analista del internet de las cosas, por citar dos ejemplos, sino en comerciales. Hoy comercial y ventas, y atención al cliente son las reinas del mercado, junto con informática y telecomunicaciones".
Diferentes informes lo corroboran. Según el "Estado del mercado laboral en España", elaborado por Infojobs y Esade, la profesión de comercial y ventas vuelve a situarse a la cabeza de las más demandadas por las empresas, concentrando una cuarta parte del total de las vacantes publicadas en la plataforma. Por su parte, atención al cliente se sitúa en tercer lugar con un crecimiento del 25,3% respecto a 2015.
Otro informe –el "Estudio sobre posiciones y competencias más demandadas en la empresa", elaborado por EAE Business School– también apunta comercial y ventas, tecnología, ingeniería y marketing como las profesiones en las que hay una mayor oferta de empleo.
PROFESIONALES ACREDITADOS
"El trabajo está en las profesiones –remarca Obeso–. Hoy las empresas buscan mecánicos, electricistas, pintores, etc., y trabajadores del sector servicios, como cuidadores, "coach," etc., pero gente bien formada, profesionales acreditados. El problema es que en España, cerca del 60% de la población activa no tiene una acreditación reconocida de formación profesional".
Ante este hándicap, los expertos destacan la necesidad de formarse a lo largo de la vida, especialmente en situaciones como la actual, en la que decrece la demanda de operadores de planta, de maquinaria... "trabajadores que están dentro de un procesos previsibles de ser automatizado y sustituidos por una máquina o un robot". Otro tema es si esta automatización es rentable, y aquí juegan factores económicos y sociales.
AUTOMATIZACIÓN PARCIAL
El informe "Un futuro que funciona: automatización, empleo y productividad", de McKinsey Global Institute, destaca que en muchas profesiones las máquinas no reemplazarán al 100% a las personas, y dentro de 35 años, el 45% de las actividades que realizan los trabajadores podrían ser automatizadas. A su vez, existe otro grupo de profesiones –como técnico de laboratorio, auxiliar de enfermería, desarrollador web, etc.– en las que el 30% de su actividad podría ser sustituida por una máquina.
PREVISIÓN
Dentro de 30 - 40 años, la mitad del trabajo que realizan los seres humanos será ejecutado por máquinas y robots, según el estudio “Un futuro que funciona: automatización, empleo y productividad”, elaborado por la consultora McKinsey Global Institute
"En algunas profesiones, en las que las tareas las pueden realizar máquinas, los trabajadores necesitan reinventarse, mientras que en otras – como psiquiatra o mediador– las personas son insustituibles", apunta el profesor Obeso, quien añade: "En general, no debemos dejar en manos de los robots aquellos trabajos que tienen que ver con la relación humana, que implican interacción, como enfermería o la resolución de conflictos".
El experto de Esade pone especial énfasis en destacar que aquello insustituible es la realización del diagnóstico. "Es un error intentar que una máquina sea la que realice el diagnóstico; debe ser la persona quien tome las decisiones y decida cómo actuar a partir de unos síntomas".
DÓNDE HAY TRABAJO Comercial y ventas lidera el ranking de profesiones más demandadas
El informe de McKinsey explica los beneficios de los robots en el lugar de trabajo y apunta que su generará la necesidad de operadores altamente capacitados. A su vez, los robots realizarán las tareas rutinarias o peligrosas y podrán liberar a las personas para que éstas lleven a cabo trabajos más creativos y que mejoren su calidad de vida. Además, permitirán incrementar la productividad, reducir los costes laborales y ocupar puestos de trabajo indeseables.
A modo de conclusión, Obeso apunta: "No tengo la más mínima idea de lo que pasará, pero debemos tranquilizarnos. El problema, al final, es que no sabemos cómo orientar a los jóvenes. Estamos en un momento confuso".