Premio con dedicatoria

Los actos en el palacio de la Moncloa son muy protocolarios y nadie se salta el guión. O casi nadie. Mariano Rajoy entregaba ayer los premios a quienes han destacado en la lucha contra la violencia de género: el Ministerio de Educación, la soprano Pilar Jurado; la actriz Miriam Díaz Aroca; el grupo La Oreja de Van Gogh; Atresmedia, los Boy Scouts, el Leganés, el comisario Jorge Zurita, la Fundación Cepaim, y Alfonso Magaña. Magaña es un aragonés de 54 años, que impidió una agresión a una mujer por parte de su pareja, lo que le costó una brutal paliza que le llevó al hospital. Fue el último en recoger la Menina de manos de Rajoy, pero no le bastó. Le dijo al conductor del acto que quería hablar y como sólo logró una negativa, se fue directo a Rajoy. El presidente, encogiéndose de hombros, respondió: “Pues hable”. Magaña arrancó con el clásico “quiero dedicar este premio...”, que presagiaba lo peor. Pero no. Se limitó a decir los nombres completos de sus abuelos . “Sin ellos no estaría hoy aquí”, y se fue contento en medio de una enorme ovación.