Las calles estrechas mantienen más alto el termómetro
El proyecto ha confirmado que en las zonas con un bajo factor de visión del cielo (a causa de calles estrechas que dejan poco porcentaje de cielo visible mirando hacia arriba), la radiación térmica que emite la Tierra queda obstaculizada por las fachadas, lo que reduce la capacidad de enfriamiento nocturno de las calles. Para hacer el trabajo, se midieron las temperaturas en 314 puntos en cuatro trayectos principales del área metropolitana y otros 10 de ámbito municipal, con una longitud de 161,5 km. Así se obtuvo un banco de datos de 1.283 valores.