Puigdemont considera el 21-D como “la segunda vuelta” del 1 de octubre
Afrontar las elecciones del 21-D como “la segunda vuelta” del 1-O para “garantizar la libertad de todos los ciudadanos” y “ratificar la dignidad de quienes defendieron las urnas”. Este fue el mensaje que el candidato de Junts per Catalunya (JuntsxCat) a presidir la Generalitat, Carles Puigdemont, lanzó ayer durante su intervención, a través de una videoconferencia emitida en directo desde Bruselas, en la presentación de los candidatos del partido en Sant Julià de Ramis (Gironès), localidad donde Puigdemont residía con su familia.
Fue el primer acto de precampaña de JuntsxCat que, pese al frío riguroso, reunió a más de medio millar de militantes y simpatizantes del partido, como la coordinadora y el responsable de organización del PDECat, Marta Pascal y David Bonvehí.
El acto de presentación tuvo lugar en un espacio simbólico: la plaza rebautizada como 1 de Octubre, que hace dos meses fue escenario de las cargas policiales por parte de la Guardia Civil para impedir el referéndum del 1-O y donde Puigdemont tenía previsto votar en el pabellón, situado enfrente.
El candidato de JuntsxCat apeló al “espíritu del referéndum” y “la dignidad” de las personas que participaron en la jornada del 1-O. Pidió que estas elecciones sirvan para “restaurar” el Govern legítimo y vuelvan a ser una “derrota histórica” para el Gobierno español. “El 1-O fue una victoria de Catalunya y los ciudadanos. Vencimos el miedo y la violencia y nos unimos por la libertad, ahora lo hemos de volver a hacer”, insistió.
El expresident de la Generalitat cargó contra el Ejecutivo de Mariano Rajoy y “su autoritarismo” y recordó que el futuro de un pueblo “no se puede decidir en los tribunales o en un consejo de ministros”. También aseguró que la imagen que se dio el día del referéndum “traspasó fronteras”. “Fuera, la gente ha podido ver la potencia de las cargas policiales, pero sobre todo la impotencia po-
lítica para resolver el problema”, puntualizó Puigdemont.
Asimismo, calificó de “auténtico golpe de Estado” la aplicación del artículo 155 de la Constitución y lamentó que el Gobierno español se haya atribuido unas funciones “que nadie les ha dado”. Puigdemont reclamó la liberación de los consejeros catalanes destituidos así como del presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, y del expresidente de la ANC y número 2 de la lista de JuntsxCat, Jordi Sànchez. “Reclamamos que salgan de donde nunca tendrían que haber entrado”, recalcó entre aplausos del público y en presencia de su mujer, Marcela Topor, quien siguió el acto desde primera fila.
Marta Pascal, por su parte, planteó las elecciones del 21-D como un “plebiscito entre Rajoy y Puigdemont”. La coordinadora general del PDECat hizo estas declaraciones antes de la presentación de la lista de JuntsxCat en Sant Julià de Ramis y después de la votación, celebrada en Girona, para incorporar nuevos cargos en la dirección ejecutiva del Partit Demòcrata. Los nuevos miembros son Ferran Bel, Montserrat Candini, Meritxell Ruiz, Maria Senserrich y Lluís Font. Según Pascal, “estas incorporaciones permitirán reforzar la dirección del partido de cara a gestionar los escenarios postelectorales del 21-D”.