Poblet saca brillo a su tesoro
El monasterio amplía y renueva su museo de arte para abrirlo a principios de 2018
El virrey de Nápoles, Pere Antoni d’Aragó encargó a un artista flamenco una talla para las exequias del Rey Alfonso V el Magnánimo, cuando en 1671 sus restos fueron trasladados a Poblet. El Crist d’Ivori, que tras la desamortización, expolio y posterior abandono del monasterio permaneció escondido durante décadas, ocupará un lugar principal en el nuevo Museo de Arte de Poblet. Con la incorporación de dos salas, el museo reabrirá a principios del próximo año con discurso renovado y la exposición de más de un centenar de piezas que hasta ahora estaban guardadas en un almacén.
“El Crist d’Ivori es una pieza excepcional, por su historia y su calidad artística, es una de las mejores muestras de escultura barroca sobre marfil; quedan muy pocas de este estilo”, explica Carme Clemente, coordinadora de los talleres de conservación y restauración de la Escola d’Art de la Diputación de Tarragona. En estos talleres se está restaurando toda la colección de orfebrería y platería, integrada por casi un centenar de piezas. En una segunda fase, a partir de febrero, los restauradores abordarán la colección de escultura y pintura sobre tela o madera.
El equipo de la Escola d’Art de la Diputación también están colaborando en los aspectos técnicos de organización del futuro museo que además del espacio actual incorporará dos nuevas salas: la de Abat Copons y la de Abat Mengucho, que antiguamente fue el dormitorio de los conversos. La exposición constará de tres bloques temáticos para entender la vida en el monasterio, catalogado como Patrimonio Mundial, y su trascendencia religiosa. “Habrá una espacio dedicado a la cruz como símbolo de la cristiandad y mostraremos cómo se ha interpretado desde el siglo XIII hasta la actualidad”, apunta Damià Amorós, del museu del Mones- tir de Poblet. El objetivo es que el nuevo espacio se convierta en un atractivo más allá del circuito del monasterio.
El abad de Poblet, Octavi Vilà destaca que el nuevo discurso expositivo permitirá mostrar piezas que hasta ahora no eran accesibles al público “y las dotaremos de sentido vinculándolas a su función litúrgica”. Además de la cruz como símbolo, el relato plantea otras temáticas como la muerte, la resurrección y la eucaristía a través de una colección de arte que incluye, además de la orfebrería, pinturas y esculturas, piezas de alabastro, cristal o tela, como relicarios, cruces procesionales o cálices. Se trata de una colección de obras -la menor parte originarias del monasterio- formada principalmente por donaciones privadas.
La puesta al día del museo forma parte del proyecto Cosmos de mejora integral del monasterio, que incluye el nuevo centro de visitantes que se está construyendo a la entrada del recinto y en el que también colabora económicamente la Diputació de Tarragona. En este espacio se presentará Poblet y su relación con el territorio y el paisaje y su vertiente cultural y espiritual para entender el monasterio antes de entrar en el recinto monumental. Junto a este centro de visitantes se ubicará el futuro Jardín Bíblico que recreará distintos escenarios de paisajes básicos de inspiración bíblica a través de las plantas.
“Todas estas inversiones pretenden aumentar el número de visitantes a Poblet, hecho que repercutirá en la economía de la zona”, destacó Josep Poblet, presidente de la Diputación durante su recién visita al monasterio.
La Escola d’Art de la Diputación restaura las piezas, incluso la colección de orfebrería