Los adolescentes contra Trump, “ese psicótico”
La superventas Anna Todd publica una versión 2.0 de ‘Mujercitas’ y alerta de la revolución antipresidente que lideran los jóvenes en EE.UU.
El color rosa que baña los libros de Anna Todd hasta en los bordes de las páginas no debe llevar a engaño sobre la personalidad de la autora. Tal vez empujada por sus legiones de lectores y por la consciencia de lo mucho que puede influir en ellos, la escritora que cautiva a millones de jóvenes de todo el mundo se expresa con la contundencia de una líder de opinión sin miedo a nada ni a nadie. Y así, avisa: “Los adolescentes de Estados Unidos están liderando una revolución contra ese presidente psicótico que tenemos”.
Todd se expresa de este modo durante una conversación con este diario a raíz de la publicación en España de Sisters. Lazos infinitos
(Planeta): una versión millennial de Mujercitas donde los personajes centrales conservan los nombres del clásico de Louisa May Alcott (Meg, Jo, Beth y Amy), pero tanto los tiempos como las tramas cambian y se actualizan. Se trata de su primera novela fuera de la serie After, por la que es más conocida y gracias a la cual se ha convertido en fenómeno con enorme tirón entre las chicas y los chicos llamados a construir el futuro.
Sisters habla de conflicto generacional; de las prácticas y consecuencias del sexting; de la esclavitud del me gusta y de la moda; del acoso escolar, y de la presión que las niñas grandes o mujeres más jóvenes padecen e interiorizan con vistas a convertirse en superwomen.
¿Por qué Anna Todd triunfa tanto, hasta el punto de que sus lectores se cuenten por decenas de millones? Ella sitúa la clave en la identificación de su clientela con los personajes de sus historias. “Los chicos no suelen verse retratados en la mayoría de los libros porque los protagonistas son casi siempre personas increíbles que salvan el mundo; yo intento cambiar eso”.
Todd tiene 28 años y empezó a escribir hace cuatro, con la memoria relativamente reciente de sus propias experiencias con las amigas, los novietes y los compañeros de instituto. Pero, más que el recuerdo, lo que le procuró una buena comunicación con gente de menor edad fue su capacidad de empatía, sus dotes para la escritura, naturalmente su imaginación, y su condición de mujer plenamente conectada que desde el principio eligió las redes para proyectar sus creaciones; en concreto, la plataforma de lectura social Wattpad.
¿Qué les pasa a los chavales de hoy? “Pues que están hartos de verse subestimados y luchan para que se les tenga más en cuenta; para que los mayores comprendan que saben mucho más y son más maduros de lo que sus padres suelen creer”, afirma.
Pero por fortuna y en virtud de su condición de internautas natos –matiza–, los adolescentes “tienen más voz hoy día”. Y ahí es donde entra, a juicio de la escritora, la capacidad de las nuevas generaciones para, con el tiempo, dar una paliza a Donald Trump.
“Es alucinante cómo de cuando en cuando, como ocurre ahora mismo, viene alguien a recordarnos el fondo racista y xenófobo de una parte de la población”, añade Todd, para quien “sólo hay dos causas, la buena y la mala”. Ella no piensa estar en el lado equivocado, subraya, y está convencida de que lo mismo hará a plazo la mayoría de la sociedad cuando lleguen al poder los ahora teenagers que la siguen.
‘Sisters’, su primera novela fuera de la serie ‘After’, va del conflicto generacional y la práctica del ‘sexting’
Esta manera tan simple de exponer las cosas parece funcionarle bien a la novelista. Su consiguiente consejo a los escritores que empiezan y tratan de imitarla puede sorprender, como poco, a los adultos que haya llegado hasta aquí: “Lo que yo les digo es que no piensen de más antes de darle a la tecla. Si yo me hubiera sentado a darle vueltas a mis historias, creo que no las habría escrito. La autoduda es lo peor”. Ah, y no hay que obsesionarse con colocar los textos en las editoriales, señala entre excusas con la representante del sello que en España la está poniendo en casa. “Es que estas empresas suelen ir por detrás de la realidad, y hay maneras diferentes de publicar. A mí me encanta internet”, dice.