‘La Vanguardia’ escoge los LIBROS DEL AÑO
El feminismo paseante de Vivian Gornick, la inmortal Mercè Rodoreda aproximándose a la muerte, la Transición vista por Martínez de Pisón y su doble de Demis Roussos, la hipnótica Solenoide del rumano Cartarescu, donde un personaje se instala un ingenio para levitar en la cama, y el debut en la novela de Jane Harper, que nos traslada a una Australia muy parecida a Puerto Hurraco, son los libros más destacados del año que acaba, según un jurado de críticos, periodistas y libreros escogido por La Vanguardia.
Gornick, autora de Apegos feroces, utiliza, según ha declarado, “la relación con mi madre como algo metafórico. Es literatura, intenté buscar lo misterioso en lo familiar y, así, lo cotidiano se convirtió en algo muy excitante. Primero pensé que sería sobre mi madre, Nettie y yo. Luego vi que debía intercalar pasado y presente, que la mujer joven con su hija debían encontrarse con la mujer mayor y su hija adulta”.
Por su parte, la resurrección de Mercè Rodoreda con La mort i la
primavera ha tenido tanto éxito que la productora Isona Passola y el director Agustí Villaronga ya preparan la adaptación cinematográfica tras los éxitos cosechados con Pa
negre e Incerta Glòria.
En narrativa en castellano, el Derecho natural de Martínez de Pisón se ha impuesto a los demás. El autor cuenta que “lo de Demis Roussos fue casualidad, la idea era contar una historia sobre un actor de las películas cochambrosas de serie B españolas, pero el personaje fue engordando...”. El hijo y narrador aspira siempre a reconstruir la familia, “pero nunca lo consigue, sin embargo su idea de rectitud da sentido a la historia. Igual que la sociedad española entonces, aspira a un consenso y a reescribir su pasado”.
El Solenoide de Cartarescu, mejor obra traducida, empezó, según su autor, “porque quería narrar lo que llamo mis anomalías, cosas peculiares y extrañas que cruzan mi mente de día y de noche, sueños, alucinaciones... La primera idea era esa, pero luego vi que el libro se desarrollaba en otra dirección. Su fuerza sería la acumulación de sucesos, pensamientos, sueños, todo... creció de modo independiente hasta convertirse en una exuberante máquina”.
En novela negra, la británica Harper apostó porque los lectores se identifiquen con el hecho “de retornar a casa, a un lugar en el que no se ha estado desde hace años”.
Una constatación final es el destacado papel de las editoriales independientes, que publican los mejores títulos de literatura catalana, no ficción y novela negra, mientras que los sellos que pertenecen a un grupo son hegemónicos en los apartados de literatura traducida y narrativa en castellano. La editorial más nominada es Seix Barral seguida, a la par, por Anagrama y L’Altra.
Un poco más del 50% de los títulos más destacados está publicado por sellos independientes