Teherán alcanza niveles de polución dañinos para la salud
Casi dos décadas de lucha medioambiental no han logrado acabar con la densa capa de contaminación que, sobre todo durante el otoño y el invierno, cubre el cielo de Teherán y paraliza las actividades cotidianas. La inversión térmica, la situación topográfica, las partículas de polvo que llegan desde los países vecinos y los millones de vehículos que inundan las calles de la capital iraní dificultan el cese del problema. Esta semana, el índice de calidad del aire superó 140 y llegó a alcanzar 161 en Teherán, un nivel considerado dañino para la salud, lo que llevó al Ayuntamiento a decretar el cierre de las escuelas . También se han ampliado las limitaciones del tráfico, restringido habitualmente en el centro urbano, permitiendo esta semana la circulación sólo en días pares o impares, dependiendo del número de matrícula. Otras medidas han sido prohibir las actividades de las canteras de arena y asfalto y las fábricas de cemento, y suspender eventos deportivos al aire libre. / Efe