Un día más en la oficina
La víspera del clásico la sala de prensa de Valdebebas siempre está abarrotada, pero Zidane se presenta como un día más en la oficina. Si ni siquiera las vísperas de dos finales de la Champions han alterado su rostro o sus nervios, tampoco lo hace el tener que jugarse media Liga ante un Barcelona que puede darle un golpe de gracia a la competición. En estos casi dos años, (Zidane asumió el mando el 4 de enero del 2016), el francés ha aprendido a manejarse con solvencia ante la prensa. Mira fijo al interlocutor, le sonríe y pocas veces contesta a lo que le preguntan. A veces, es él el que formula la cuestión, como ayer, cuando le preguntó a uno de los periodistas si era de Madrid o al menos madridista. Las preguntas rara vez son muy incisivas. Desde la mesa saben bien a quién darle el turno. Los momentos más surrealistas se viven cuando interviene un periodista extranjero. Ayer, uno japonés sorprendió con una larga intervención en la que le explicó a Zidane cómo tenía que jugar su equipo si quería ganar. El francés le miró con ojos como platos, no entendió exactamente qué le estaban preguntando y replicó: “No te voy a decir cómo vamos a jugar”.