Los cuatro protagonistas históricos
Los cuatro condes protagonistas de esta docuficción compartían una fuerte personalidad y una gran convicción en la defensa de sus proyectos políticos. “Guifré el Pelós, que había sido enviado por el rey franco para poner orden y cobrar impuestos, fue el fundador de la dinastía de los condes de Barcelona y el primero que, sin permiso real, pasará el título a sus hijos, un gesto revolucionario para la época”, explica Porta. Después vino Guifré Borrell, quien ejerció “de líder de todos los condados de Barcelona y consolidó la soberanía del territorio frente a francos y sarracenos”. El tercero fue Sunyer, un conde expansionista que conquistó tierras hasta Tortosa y Tarragona y que vertebraría el territorio: “Crea lo que ahora llamamos estructuras de estado a partir de la construcción de monasterios y castillos para tejer una red civil, militar y religiosa”, apunta al director. Sunyer será sucedido por su hijo Borrell II, quien a pesar de intentar pactar con el califato, no podrá evitar que Almanzor arrase los condados catalanes. “Borrell II se quedó solo después de haber pedido ayuda a Roma y al imperio carolingio. Y de esta manera se rompe cualquier vínculo de vasallaje con el rey franco y los condados catalanes se proclaman territorio soberano sin dependencia de nadie”.