Barreda se coloca líder en motos en el Dakar
El castellonense gana y ya es líder en busca de su primer tuareg
A la pregunta de “¿quién es el principal favorito a la estatuilla del tuareg en motos?”, el especialista de turno, expiloto experimentado o participante en liza, frunce el ceño, suelta un soplido o directamente responde como Marc Coma: “No veo ningún candidato claro”. Es la tónica habitual del Dakar, la incertidumbre sobre dos ruedas, desde que la carrera dejó de ser un mano a mano entre Marc Coma y Cyril Despres, en el 2012 por última vez. Sin el catalán (retirado en julio del 2015) ni el francés (se pasó a los coches aquel enero), el rally busca amo con nuevas coordenadas.
La pelea por el Dakar en moto ha modificado los registros: ha pasado de ser básicamente una pugna entre dos pilotos a una batalla abierta entre dos fábricas con una flota de pilotos rapidísimos. De Marc contra Cyril, a KTM contra Honda, es decir, una disputa imprevisible entre una decena de pilotos. Resultado: en el 2012, entre el catalán y el francés se repartieron 8 de las 15 victorias de etapa y el liderato de la general en 14 días. Y en los dos últimos años ha llegado a haber 15 ganadores de etapa diferentes y 8 líderes, entre ellos Toby Price –ganador del 2016– y Sam Sunderland –del 2017–, vencedor del primer día.
La posibilidad de triunfos de etapa y de victoria final se ha diversificado ante la ausencia de dos pilotos dominantes y la llegada de una nueva hornada marcada por la velocidad. “Ahora están los mejores pilotos del mundo del off road –procedentes del enduro y el motocross–, siete u ocho pilotos con la ambición de salir a ganar”, argumenta Joan Barreda, uno de los más experimentados de la decena de favoritos, en su 8.º asalto y con 19 victorias en especiales. Empeñado en contradecir esta diversidad, es el que más ha ganado en los últimos siete años.
“Ha cambiado todo mucho: la carrera ha evolucionado, cómo se hacen las etapas, la navegación, los equipos... Antes había sólo uno de fábrica (KTM) y con dos pilotos (Coma y Despres) tenía cubierta la victoria, mientras que ahora es una carrera impredecible, que es lo que busca la ASO”, razona el castellonense, quien, con una lesión en la muñeca que le dejó casi sin poder entrenarse, arrancó con calma, 5.º el primer día, y ayer ganó la segunda etapa, que lo sitúa en el liderato.
Para Nani Roma, primer ganador español en motos (2004), el principal motivo del cambio de escenario sobre dos ruedas ha sido la irrupción “de una nueva generación de jóvenes que corren mucho y van con unas motos cojonudas, más pequeñas y compactas. El concepto de rally ha cambiado: todos llevan un ritmo altísimo y se caen muchísimo; la mayoría están medio cojos...”, analiza el de Folgueroles.
Barreda sería, según Roma, el principal favorito. “Pero aun siendo un piloto que tiene mucho talento debe encontrar su camino; con el talento no hay suficiente en el Dakar”, comenta Nani. “Hay que ser regular”. Y unas veces por fallos mecánicos de Honda, y otras por errores de precipitación, de querer correr más de la cuenta, Bang-bang no ha pasado del 5.º puesto (2017) en sus siete participaciones.
Ayer, saliendo 5.º, sin tener que abrir pista por las dunas peruanas, Barreda gobernó con autoridad y metió 2m54s a Van Beveren (Yamaha) –segundo por segundo día–, 4m24s a Walkner (KTM), y 6m01s a Sunderland (KTM), 7.º, a priori su principal amenaza para el título. “Al saltar una duna se me ha resentido bastante la mano”, lamentaba. “Pero sobre todo en la segunda parte he mantenido un buen ritmo y he podido recuperar un poco de tiempo”.
En coches, Despres logró su segunda victoria de etapa en su andadura sobre cuatro ruedas, liderando el trío Peugeot en la meta, y se aúpa al liderato de la general. Sainz, 6.º, sufrió dos pinchazos y Roma, 13.º, perdió 22 minutos en una duna.
SIN AMO EN MOTOS
Desde el adiós de Coma y Despres, nadie ha impuesto su hegemonía, pero Barreda es quien más etapas gana
GOLPE DE AUTORIDAD
Sin tener que abrir pista en las dunas, el de Honda asesta un primer golpe a los rivales con su 19.ª victoria