JxCat deja en manos del Parlament la investidura del president cesado
El grupo insiste en que el reglamento de la Cámara no obliga a que esté presente
Junts per Catalunya no cede en su empeño de investir a Carles Puigdemont como president de la Generalitat, pero sigue sin revelar la fórmula con la que pretende lograr ese objetivo, que podría chocar con la opinión de los letrados del propio Parlament.
“No tenemos ninguna duda de que el reglamento permite la investidura de cualquiera de los diputados. No hay nada que impida la elección del señor Puigdemont”, aseguró ayer en Bruselas Elsa Artadi, diputada electa de JxCat y jefa de la campaña electoral. ¿Cómo? “Eso no lo decidiremos hoy sino en el camino hacia el pleno” de la próxima semana pero “contemplamos todos los instrumentos que prevé el reglamento del Parlament”, añadió sin entrar en más consideraciones jurídicas o tecnológicas.
Los letrados del Parlament podrían no compartir esa opinión, pero JxCat no se siente vinculado por su posición, que todavía no se ha plasmado en un informe oficial. El candidato a la presidencia presenta “delante del pleno su programa de gobierno y solicita la confianza de la Cámara”, reza el reglamento, lo que según la opinión de sus letrados implica que la reinvestidura de Puigdemont sólo puede ser presencial. Pero esta no es la posición de Junts per Catalunya: “A quien toca decidir cómo se aplica el reglamento en cada una de las circunstancias es el presidente del Parlament, y a la Mesa, o bien al pleno del Parlamento, que es soberano y decide cómo se aplica el reglamento”, discrepó Artadi.
La posibilidad de que Puigdemont sea elegido president a distancia –está por ver si por vía telemática o delegando en otro diputado– chirrió a oídos de la escasa prensa internacional presente, que interrogó a los diputados electos de JxCat sobre cómo pensaba ejercer sus funciones a distancia. “El próximo miércoles se constituirá el nuevo parlamento” y habrá consultas para ver qué candidato “reúne más apoyos” para la investidura, explicó primero Artadi. “Esperamos que el president Puigdemont obtenga los votos del resto del bloque independentista y que el 29, el 30 o el 31 de enero sea elegido por la mayoría absoluta de la Cámara para volver a ser presidente”, añadió.
“¿Qué va a pasar después, va a haber algún movimiento en el Tribunal Constitucional o el Gobierno español? No podemos anticipar qué va a pasar. Sólo pedimos que respeten la democracia del Parlamento catalán”, subrayó Artadi apelando a que España no puede decidir otra vez “quién puede ser presidente de Catalunya”.
La vuelta a Catalunya de Puigdemont en las condiciones actuales está fuera de cuestión. “No descartamos nada. Si pudiéramos escoger, volverían esta misma tarde con nosotros” pero “es evidente que eso ahora mismo no es posible” y “no les haremos volver para que vayan a prisión, no tendría sentido”, dijo.
Eduard Pujol, por su parte, defendió que no hay contradicción entre esta fórmula y la promesa electoral de que había que votar a Puigdemont para reinstaurar la situación previa a la aplicación del 155 e investirlo president.
Artadi y Pujol comparecieron ante la prensa en un descanso de la reunión de unos 25 diputados electos de JxCat (en total, el grupo tiene 34). Era la primera vez que se reunían como grupo. La cita tuvo lugar en Bruselas para poder contar con Puigdemont, que se niega a volver a España mientras haya causas judiciales abiertas contra él y los cuatro exconsellers que llegaron con él a Bélgica a finales de octubre del año pasado. “Esta reunión de trabajo debería haber tenido lugar en el Parlament. Estar aquí es una muestra más de la anormalidad de estas elecciones”, recalcó Artadi.
A la cita de Bruselas faltaron sin embargo, entre otros, el exconseller de Interior Quim Forn y Jordi Sànchez (expresidente de la ANC), ambos en prisión preventiva, así como los miembros del Govern cesado, Jordi Turull, Josep Rull y Lluis Guinó, que no están autorizados a salir de España. Artadi evitó comentar las declaraciones realizadas anteayer ante el juez por Forn y Sànchez contra la vuelta a la vía unilateral para lograr la independencia de Catalunya, pronunciamientos que calificó de “estrategia de defensa”.
La reunión se celebró en el hotel President Park, de la cadena catalana Husa. “¿Qué pasa, qué pasa, quién va ahí?”, preguntaban los chiquillos al paso de los políticos catalanes por un parque en el desfavorecido barrio de la estación del Norte. El destino de la comitiva, una cancha de baloncesto rodeada de una vistosa estructura de color amarillo que sirvió de marco para la foto de familia de JxCat.
“No les haremos volver para que vayan a la cárcel, no tendría sentido”, afirma Elsa Artadi, diputada electa