Juana Rivas se enfrenta a cinco años de cárcel por no devolver los hijos al padre
La Fiscalía acusa de sustracción de menores a la granadina que escapó de Italia
“Dura petición fiscal para Juana Rivas”, en opinión de su abogado José Estanislao López. El ministerio público acusa provisionalmente a la madre de Maracena (Granada) de dos delitos de sustracción de menores, uno por cada hijo, y solicita la pena de dos años y medio de cárcel por cada uno, un total de cinco. Además, pide que se le inhabilite para ejercer el derecho de patria potestad por un plazo de seis años. Y al pago de las costas judiciales.
La Fiscalía Provincial de Granada considera que Juana Rivas hizo caso omiso a cinco instancias judiciales que a lo largo de nueve meses le requirieron sobre la obligación de devolver a sus dos hijos, de 11 y 3 años, al padre, el italiano Francesco Arcuri. Según el escrito fiscal, Rivas era “consciente” de estas resoluciones judiciales, pero “con ilícito ánimo de incumplirlas, permaneció oculta con sus hijos en un lugar indeterminado sin facilitar su paradero y a sabiendas de la obligación que pesaba sobre ella de restituirlos”.
Enrique Zambrano, abogado que representa a Arcuri, manifestó su acuerdo con la petición fiscal, aunque también añadirá el delito de desobediencia a las decisiones de los jueces, que no está recogido por la Fiscalía. Arcuri fue condenado en el 2009 por lesiones en el ámbito familiar, una sentencia que se dictó por conformidad de las partes, y posteriormente volvió a ser denunciado por Juana Rivas.
La primera reacción de Juana Rivas, realizada en declaraciones a una agencia de noticias, señala que “seguiré la lucha hasta la victoria, porque esto no puede acabar de otro modo. Es lo justo haciendo balance de todo lo que ha pasado”. El abogado de la mujer granadina observa “mucho margen para la defensa” de la mujer ya que, en su opinión, el escrito fiscal no recoge el hecho de que Juana Rivas tuvo que escapar de Carloforte (Italia) con sus hijos para huir de una situación de maltrato continuado por parte del que entonces era su compañero sentimental, situación que se habría prolongado entre junio del 2013 y mayo del 2016. “Y los niños no tienen la nacionalidad italiana, como dicen algunos escritos judiciales”, añade.
El escrito del fiscal relata que Juana Rivas se desplazó con sus hijos desde Italia a Granada el 18 de mayo, después de haber acordado con el padre que pasarían un tiempo de vacaciones en España. El 2 de agosto, Rivas comunicó al padre de los niños su negativa a volver a Italia y permaneció oculta con ellos, “pese a que era consciente de su obligación de restituirlos a Italia con su padre, donde residían y estaban escolarizados”.
El juzgado de instrucción de Granada incoó diligencias contra ella y la citó a declarar el 8 de agosto, pero Juana Rivas no acudió, por lo que se acordó su detención y la “entrega inmediata y sin excusas” de los menores a su padre.
La mujer se presentó ante el juez de guardia el día 22, pero lo hizo sin sus hijos, pese a lo cual fue puesta en libertad. Nuevas requisitorias fueron presentadas ante la “falta de colaboración total y absoluta” mostrada por Juana Rivas, según la juez que ha instruido el caso, hasta que la mujer finalmente cedió y entregó a sus hijos el pasado 28 de agosto.
La petición fiscal es el paso previo a que el juez de instrucción establezca la fecha de inicio del juicio oral. En el escrito de la Fiscalía no se hace ninguna referencia a que el padre italiano tenía una condena firme por violencia de género en el ámbito familiar, ni la existencia de nuevas denuncias. Asimismo, un tribunal de Cagliari tiene abierto un procedimiento civil para decidir sobre la guarda y custodia de los menores.
Juana Rivas recibió autorización judicial para pasar las fiestas de fin de año con sus hijos, pero lo tuvo que hacer en Cerdeña y no en España, como era su intención.
“Seguiré la lucha hasta la victoria, porque esto no puede acabar de otro modo”, dice la madre