Las estilistas ocupan los palacios
María Teresa Turrión es la niñera de los príncipes Jorge y Carlota de Cambridge y, además, una estilista de primera aunque ella no lo sabe. Formada en la escuela Norland de donde salen las niñeras de los hijos de la alta sociedad británica, en 2014 fue contratada para cuidar del primer hijo de Guillermo y Catalina y un año después se hizo cargo, también, de la niña recién nacida, quien fue presentada en público con una toquilla y un gorrito comprados en una tienda de San Sebastián. Luego se supo que fue la madre de la niñera, por encargo de ésta, quien compró esas y otras prendas y desde entonces María Teresa Turrión ha tenido como misión llenar de estilo el armario de los dos nietos del príncipe de Gales con ropa infantil hecha en España. Clásicas prendas de niños y niñas bien, como vestidos de nido de abeja; jerséis de perlé; camisas de batista; abriguitos de paño con el cuello de terciopelo; capotas de piqué; toquillas de lana; faldones de organdí y zapatos merceditas con los que hacer frente a la invasión de anoraks de nailon, chandals con personajes de Disney y botas de agua de Hello Kitty.
María Teresa Turrión viste a los niños Cambridge como ella siempre ha vestido a los niños que ha cuidado y como seguramente la vistieron a ella; ha creado un estilo aunque no era ese el objetivo principal de su trabajo. No es el caso de las estilistas profesionales como Jessica Mulroney, una canadiense que ideó el vestuario del personaje de la abogada Rachel Zane en Suits, el papel que interpretaba Meghan Markle, y que es, además, la estilista de Sophie GregoireTrudeau, la mujer de Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá. Mulroney es la responsable del estilismo de la prometida del príncipe Enrique, hasta del despeinado que lució hace unos días. Se trata de convertir a Meghan en una princesa de hoy en día; activa socialmente y ligeramente despreocupada por el vestir. Todo perfectamente planificado para que parezca espontáneo .
No es eso lo que le ocurre a la reina Letizia, empeñada en adoptar las últimas tendencias, quien sabe si por consejo de Eva Fernández, la estilista que trabaja en su secretaría en temas de vestuario. Letizia tenía ya preparados los modelos que iba a lucir esta semana en Marruecos, un estilismo muy cuidado y acorde con el paisaje, pero el viaje de Estado de los Reyes se suspendió en el último momento. Aunque ni el Gobierno ni la Zarzuela lo admitirán (son muchos los temas calientes como el de Ceuta y Melilla), lo cierto es que, a pesar del interés de ambos gobiernos en llevarse bien y aún mejor, si cabe, el viaje se ha suspendido porque al rey Mohamed VI no le venía bien. Por cierto, para príncipes estilosos, Mulay Hassan, el heredero marroquí, todo un dandi y aún no ha cumplido 15 años.