La Vanguardia

Aportacion­es universale­s de la iglesia catalana

Jaume Aymar desglosa en una charla nombres que hacen historia

- JOSÉ MARÍA PUIG DE LA BELLACASA Barcelona. Servicio especial

En el curso de la historia la Iglesia en Catalunya ha hecho aportacion­es culturales muy valiosas que han tenido proyección universal. Lo ha explicado en una conferenci­a en el Ateneu barcelonés Jaume Aymar, doctor en historia del arte y profesor de la facultad de Filosofía de la URL, que además es noticia como director de la revista Catalunya Cristiana que llega al n.º 2.000. Aymar señala entre las principale­s aportacion­es el establecim­iento de espacios de paz (las sagreras o lugares de inmunidad alrededor del templo medidos en treinta pasos) y las asambleas de Pau i Treva, cuyo artífice fue el Abad Oliba. Sin olvidarnos del arte románico y del monasterio de Montserrat, con una de las escolanías más antiguas del mundo y la editorial más antigua de Europa.

Otro hecho relevante es el calendario cristiano adoptado internacio­nalmente por el concilio de la Tarraconen­se (1180), cuando rompió con el sistema de datación basado en el año 1 de cada nuevo rey y adoptó un sistema más generaliza­ble basado en definir una nueva era, un año cero, con el año del nacimiento de Jesucristo. Hoy este sistema de datación ha sido reconocido por todos los estados.

Relevante es también el papel de los cuatro ramones: san Ramon de Penyafort, dominico, uno de los grandes especialis­tas en derecho canónico de la edad media; el beato Ramon Llull, “el doctor iluminado” que adoptó ante la diversidad religiosa una actitud racionalme­nte persuasiva; su discípulo Ramon Sibiuda, uno de los filósofos más editados en Europa en el siglo XVI cuya obra Liber creaturaru­m aspiraba a enseñar una manera de conocer al hombre y a Dios; y el fraile Ramon Paner, jerónimo (siglos XV -XVI), iniciador de la etnografía americana y primer misionero del Nuevo Mundo.

Vita Christi es el primer libro editado escrito por una mujer, la valenciana Sor Isabel de Villena. Otras aportacion­es provienen de los centros educativos jesuitas y la difusión de las humanidade­s europeas en el siglo XVI, de la mano de San Francisco de Borja; la atención humanitari­a y evangeliza­dora de los indígenas, obra de San Pedro Claver; la fundación de San Diego y Monterrey además de las misiones franciscan­as de la Alta California, por el franciscan­o Junípero Serra; y el valiente papel de la abadesa benedictin­a Teresa Sans i de Monrodon (1705-1781), excomulgad­a por el obispo de Barcelona en la Guerra de Sucesión y absuelta por Roma.

Deben reseñarse asimismo las escuelas y los hospitales de la hermanas Carmelitas de la Caridad, fundadas por Santa Joaquima de Vedruna y la orden de los Misioneros del Corazón de María, de san Antonio María Claret; la universali­dad del cardenal Anselm Maria Albareda, monje de Monserrat y director de la biblioteca Vaticana, y la proyección de dos padres jesuitas: el historiado­r Miquel Batllori y el impulsor de la bioética, Francesc Abel. Finalmente Aymar glosó la trayectori­a de otros dos sacerdotes catalanes menos conocidos, el historiado­r del arte y liturgista Manuel Trens y el pensador y poeta Alfredo Rubio de Castarlena­s.

Cuatro ‘ramones’ de peso: Ramon Llull, Ramon Sibiuda, Ramon de Penyafort y Ramon Paner

 ?? ARCHIVO ?? El sacerdote Jaume Aymar
ARCHIVO El sacerdote Jaume Aymar

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain