Una aplicación de fitness revela la posición de bases militares de EE.UU.
Strava comparte en un mapa de satélite los lugares por donde corren sus usuarios
Un mapa interactivo, que se puede encontrar en línea, ha dejado al descubierto la localización y los movimientos de los soldados que se encuentran en las bases militares de Estados Unidos en áreas sensibles, como Irak, Siria y Afganistán. El Global Heat Map, publicado por la aplicación de tracking deportivo Strava, utiliza la información que sus usuarios comparten sobre sus actividades físicas para cartografiar las ubicaciones y movimientos de sus suscriptores, e ilumina las áreas con más actividad. El mapa que actualmente todavía se puede consultar –fue publicado en noviembre del 2017– no es en vivo, pero muestra un patrón de actividad acumulada entre el 2015 y septiembre del 2017.
El descubrimiento lo hizo público en Twitter Tobias Schneider, un especialista de seguridad que forma parte de un grupo que descubrió que las bases militares podían identificarse gracias al mapa.
Al observarlo, zonas como Europa Occidental o Estados Unidos aparecen completamente iluminadas, pero otras están casi por completo a oscuras, excepto pequeñas zonas. Si se amplían estas áreas en países como los anteriormente mencionados, la ubicación se corresponde con bases militares, algunas más conocidas que otras. En Irak, por ejemplo, las zonas que se destacan en el mapa se corresponden con las base de Taji, al norte de Bagdad; de Qayyarah, al sur de Mosul; de Speicher, cerca de Tikrit, y de Al-Asad, en la provincia de AlAnbar.
Strava se publicita a ella misma como la “red social de los atletas”, y asegura que tiene 27 millones de usuarios en todo el mundo. La aplicación usa el GPS de los dispositivos y la geolocalización para establecer la posición y el recorrido exactos por los que el atleta realiza su actividad física. Después, este puede compartir esta información con otros atletas, a modo de sugerencia de, por ejemplo, un buen itinerario para hacer deporte, y para que el resto de usuarios traten de batir sus tiempos. Además, Strava ofrece la posibilidad de mandar a un aviso a un amigo para que pueda monitorizar la actividad física del usuario, y –de nuevo– gracias al GPS y a la geolocalización, el amigo pueda saber en cualquier momento dónde está en caso de que el usuario de Strava tenga una emergencia. El problema ha llegado cuando personal de bases de Estados Unidos ha compartido sus carreras y Strava ha colocado todas sus sesiones sobre un mapa con imágenes tomadas por satélite.
En este mapa no sólo aparecen bases del ejército estadounidense, sino también de las fuerzas armadas de otros países, entre ellas bases españolas como la de Viator de la Legión, que está censurada en Google Maps, pero que aparece en el mapa de Strava.
Además de la ubicación, la aplicación ofrece información de los desplazamientos y los itinerarios de sus usuarios, que normalmente se usa asociada con algún dispositivo de control de la actividad física o directamente con la aplicación instalada en el teléfono inteligente.
Ante la polémica, Strava se ha remitido a un comunicado que emitió en julio del 2017, en el que explicaba que las actividades que se marcan como privadas se excluyen automáticamente del mapa y que son los usuarios los que las deben marcar como tales.
Por su parte, el Departamento de Defensa de Estados Unidos está estudiando la situación y ha asegurado que “se toma muy en serio estos asuntos” y que está revisando la situación para determinar si su personal requiere de “capacitación o asesoramiento adicional, y si se deben desarrollar políticas adicionales para garantizar la seguridad del personal en el país y en el extranjero”, dijo la mayor Audricia Harris a Associated Press.
Tras el anuncio del grupo de Schneider, este fin de semana varias personas se han dedicado a examinar el mapa con detalle y, por ejemplo, han descubierto el cuartel general de Taiwán desde el que este país gestiona sus misiles de crucero, y con los que podría atacar a China a través del estrecho que separa a ambos países.
También han quedado al descubierto una base de misiles de crucero del ejército de Taiwán y una base de la Legión