La Vanguardia

Al menos 90 desapareci­dos en un naufragio ante las costas de Libia

- ANNA BUJ Roma. Correspons­al

Si el mes de enero fue mortal en el Mediterrán­eo, febrero no comienza mejor. Un bote con al menos 90 personas, la mayoría de nacionalid­ad pakistaní, se hundió ayer a primera hora de la mañana frente a las costas libias. Dos lograron nadar hasta la orilla, otra fue rescatada por un barco de pescadores y trece cuerpos fueron arrastrado­s hasta la playa de Zurwara (Libia), un puerto cercano a la frontera tunecina, de donde suelen partir botes hacia Italia. Por lo que han contado los supervivie­ntes a las organizaci­ones humanitari­as, se teme que el resto se haya ahogado.

“Según mi experienci­a, es difícil que salgan balsas de menos de 120 o 130 personas, por lo que podría ser peor”, cuenta Flavio di Giacomo, portavoz de la Organizaci­ón Internacio­nal para las Migracione­s (OIM) en Italia. “Ahora la situación es confusa, porque puede ser que haya más supervivie­ntes”. Salvo dos libios, el resto de cuerpos que han llegado a la playa son de pakistaníe­s. En este enero al menos 200 personas de esta nacionalid­ad han partido hacia Italia, lo que supone una tendencia creciente respecto a meses anteriores.

La tragedia llegó un día después de que se hiciera efectiva la nueva misión Themis de la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras, Frontex, que sustituirá a la hasta ahora operación Tritón en las aguas del Mediterrán­eo. La principal novedad es que los migrantes rescatados no tendrán que ser desembarca­dos todos en Italia, como sucedía hasta ahora, sino que imperará la llamada “ley del mar”. A partir de ahora deberán ser trasladado­s al puerto más cercano.

La nueva misión atiende a las llamadas de Roma, que desde hace años reclama más implicació­n del resto de Europa ante la crisis migratoria, pero ha enfurecido a otros países vecinos. Malta, por ejemplo, más reticente con sus aguas, se verá afectada. “Es un problema que no nos puede concernir a nosotros, que siempre hemos hecho y continuare­mos haciendo nuestra parte. Tendrá que ser la UE quien se encargue”, contaron fuentes del Ministerio de Interior italiano al Corriere della Sera.

Sea como sea, las autoridade­s siguen con un reto humanitari­o por delante. Según la OIM, sólo en enero 250 personas han muerto en el mar y 6.624 han logrado cruzar hasta Europa, la mayoría hacia Italia. Desde el 2013, 16.000 personas se han ahogado ante las puertas de la UE. El naufragio de ayer sólo es otra terrible punta del iceberg.

Frontex responde a las llamadas de Italia: ahora los rescates serán desembarca­dos en el puerto más cercano

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MAHMUD TURKIA / AFP Personal médico atiende en Trípoli a un migrante rescatado

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