Dos mujeres, graves al ser atacadas por sus parejas en Murcia y Tenerife
Varios casos con tintes de violencia machista han jalonado el fin de semana en Murcia, Tenerife y Vitoria. La Guardia Civil busca desde ayer a la expareja de la joven de 26 años herida el domingo por arma de fuego en Las Torres de Cotillas (Murcia). Las fuerzas de seguridad lo consideran sospechoso de la agresión. La joven acudió al mediodía al servicio de urgencias de Atención Primaria de Las Torres de Cotillas en un vehículo privado, con heridas por arma de fuego en el costado y fue trasladada en una ambulancia al hospital universitario Virgen de la Arrixaca de Murcia, donde fue ingresada en estado crítico e intervenida inmediatamente. Según han informado fuentes cercanas a la investigación, el sospechoso tiene dos hijos en común con la víctima.
Mientras, permanece ingresada en la unidad de cuidados intensivos de un centro hospitalario de Tenerife, una mujer de 61 años que fue apuñalada el viernes por la noche en Adeje (en el sur de la isla). Según declaró la víctima a la policía, el viernes, poco antes de la medianoche, fue atacada en el apartamento donde residen por su marido, de 66 años, con un cuchillo de cocina. La pareja es de nacionalidad georgiana. La mujer resultó herida de gravedad al recibir varias puñaladas, aunque su estado es estable. El presunto agresor está detenido en dependencias policiales y se prevé que hoy pase a disposición judicial.
Por otro lado, la Ertzaintza detuvo en Vitoria a un hombre de 39 años, con antecedentes por violencia machista, acusado de intentar agredir sexualmente a su pareja sentimental y golpearla en todo el cuerpo. Los hechos, según confirmaron ayer fuentes de la Policía vasca, ocurrieron a las 5.40 h de la mañana del sábado en un bar en el barrio de Aranbizkara de la capital alavesa.
Un vecino de la zona escuchó ruidos provenientes del local, que regenta la mujer y que en ese momento estaba cerrado al público, y avisó a la Ertzaintza. Los agentes que se desplazaron al lugar levantaron la persiana y, como la puerta estaba cerrada, tuvieron que romper un cristal para entrar al interior.
Allí se encontraron a la mujer, que estaba muy alterada y con signos de haber recibido numerosos golpes, además de tener una herida en la cabeza. La víctima relató a los agentes que había sido víctima de un intento de agresión sexual y golpeada por su pareja, que se encontraba en el bar. El hombre, con el que mantenía una relación sentimental desde hacía poco tiempo, fue detenido e ingresó posteriormente en prisión por orden de un juez. La mujer tuvo que ser trasladada al hospital de Txagorritxu para ser atendida.