La ANC abronca a JxCat, ERC y la CUP por no formar Govern
Los independentistas exigen a sus representantes “que se la jueguen”
La ANC convocó ayer a sus activistas a manifestarse para presionar a Junts per Catalunya, ERC y la CUP que alcancen un acuerdo que les permita gobernar y “hacer la república”. Bajo el lema “República ara!”, 45.000 personas, según la Guardia Urbana, llenaron el Passeig de Colom hasta la avenida del Marquès de l’Argentera, y reclamaron a sus representantes “que se la jueguen” para llevar a cabo lo prometido en la campaña electoral: restablecer la legalidad anterior al 155 y avanzar hacia la república.
“La gente cumplió, se la jugó para defender las urnas el 1-O y votó masivamente el 21-D, ahora toca dar un paso adelante”, dijo el vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, quien afirmó que “no hay marcha atrás, ya no nos sentimos ciudadanos del reino de España sino de la república catalana y, como tales, exigimos su implementación”.
Alcoberro recordó que se votó poco antes de Navidad y estamos a las puertas de Semana Santa y “no es admisible que aún no haya gobierno”. Ochenta días de negociaciones infructuosas y guerras internas entre JxCat, ERC y la CUP. Todos los discursos pronunciados ayer sonaron a tirón de orejas a esa mayoría independentista que ganó las elecciones el 21-D y que, pese a ello, ha sido incapaz de articularse. “Debemos actuar unidos, con coraje e inteligencia. Sólo cuando hemos actuado unidos hemos logrado salir victoriosos”, recetó Alcoberro.
La ANC admite que tampoco han ayudado los obstáculos judiciales puestos a los dos candidatos a la investidura propuestos hasta el momento, el president cesado Carles Puigdemont y el expresidente de la ANC Jordi Sànchez, el primero en Bruselas y el segundo preso en Estremera. En este sentido, Alcoberro consideró “indignante la falta de separación de poderes que hay en España” y reivindicó la legitimidad
del Parlament. “Sólo el Parlament puede decidir quién es el president”. Los manifestantes dejaron claro que siguen considerando a Puigdemont su presidente.
Al independentismo se le está acabando la paciencia y eso fue patente en el ambiente de la manifestación de ayer. Los casi cinco meses transcurridos desde la fallida declaración de independencia y sus consecuencias, han erosionado un movimiento que se autodenominaba “la revolució dels somriures”. Ayer no abundaban. El optimismo y la ilusión han dejado paso a la perplejidad, el desengaño y la indignación, que se plasmó en el duro discurso de Jordi Pairó, miembro del secretario nacional de la ANC. “¿Qué está pasando? ¿Qué no nos están diciendo? ¿Por qué nos rompimos la cara el 1-O? ¿Qué quiere decir un candidato efectivo? ¿Hasta cuándo permitiremos la imposición? ¡Basta ya, la soberanía no se cede, se ejerce!”, fueron algunos de los dardos lanzados directamente a la clase política y ovacionados por el público asistente. Pero pese a las reclamaciones, los partidos siguen sin estar más cerca del acuerdo y los representantes de JxCat, ERC y la CUP presentes en la manifestación, volvieron a evidenciar lo que les separa. La protesta de ayer tuvo su réplica en otras capitales europeas. La de Londres contó con la presencia de la exconsellera Clara Ponsatí.
EL REPROCHE
“¿Qué está pasando? ¿Qué no nos están contando?”, recriminó la ANC a los partidos