Muchas mujeres tienen amores más jóvenes, desafiando convencionalismos
Mujeres que desafiaron el qué dirán y vivieron historias de amor con hombres más jóvenes
¿Qué une a mujeres tan dispares y tan separadas en el tiempo como Diana de Poitiers, Victoria de Inglaterra, Marie Curie, Coco Chanel, Agatha Christie, Gala o Dolores Ibárruri, Pasionaria? Todas ellas tuvieron parejas mucho más jóvenes que ellas y todas, pese a su inteligencia, su poder o su dinero tuvieron que hacer frente a las burlas, desconfianzas y rumores sobre estas relaciones desiguales.
Si hay un prejuicio hacia la mujer que no ha evolucionado a lo largo de los siglos, hasta el punto de que tal vez sea el último tabú que queda en las relaciones sexuales y sentimentales, son las parejas formadas por una mujer mayor y un hombre más joven. El caso inverso, aunque la diferencia de edad sea notoria, se ve como lo más natural del mundo. “El mayor pecado que comete una mujer a la que no se considera joven es recordarnos que aún tiene vida sexual”, ironiza la periodista y escritora Dolores Conquero, autora del libro Amores contra el tiempo (Planeta), que recoge nueve de esas historias que desafiaron los convencionalismos. “Hemos superado tabúes como la homosexualidad y la transexualidad y algo tan obvio como que una mujer mayor tiene vida sentimental y sexual aún molesta, aunque te venden que la madurez masculina sí es interesante”, opina Conquero. Si antes el prejuicio tenía que ver con la moral, ahora se relaciona con el culto a la juventud.
La autora creó el blog minovioesmasjoven.com cuando sufrió en primera persona esta diferencia de trato y ahora ha rastreado en la vida de mujeres singulares que vivieron el amor con hombres más jóvenes y se enfrentaron por ello a enormes dificultades.
A Diana de Poitiers y Enrique II de Francia les separaban 19 años. Tuvieron un largo y público romance –aunque él estaba casado con Catalina de Médicis– que no acabó hasta la muerte del rey, en 1559.
Gala, mujer y musa de Dalí, y la exmodelo Fiona Campbell Thyssen sufrieron en sus carnes la oposición familiar a sus relaciones. Fiona y Alexander Onassis nunca lograron contraer matrimonio por la firme oposición del armador griego Aristóteles Onassis porque ella era una divorciada que tenía 16 años más que su hijo. Cuando Alexander murió en un accidente aéreo, al parecer Onassis se arrepintió de su error. Las críticas también se cebaron en Gala, diez años mayor que Dalí, a pesar de no ser tan arpía como se la ha retratado habitualmente.
Marie Curie y Dolores Ibárruri también sufrieron críticas furibundas por sus relaciones ‘desiguales’
Marie Curie sufrió gritos e insultos a la puerta de su casa cuando tras enviudar de Pierre Curie, con quien compartió el Nobel de Física, y ya con un segundo Nobel, el de Química, se emparejó con Paul Langevin, 14 años menor que ella y también científico. Los colegas de Curie usaron el escándalo para tratar de boicotearle la carrera. Ni Marie ni Paul llegaron a saber nunca que dos nietos suyos acabarían casándose...
Dolores Ibárruri, Pasionaria, cuando rondaba los 40 y estaba separada de su marido, mantuvo una relación con un camarada, Francisco Antón, 14 años menor que ella. Pasionaria, aun considerada un mito (o por eso mismo), tuvo que enfrentarse a las críticas por esta relación, especialmente las procedentes desde su propia formación, el Partido Comunista, que fue utilizada contra ella en la pugna por la secretaría general del partido.
Muchas de estas mujeres eran bellas y aparentaban menos edad de la que tenían, pero no era el caso de Agatha Christie o la reina Victoria. Ello no fue un obstáculo para resultar atractivas a sus parejas. ¿Qué tienen en común las mujeres que desafiaron convencionalismos sobre la edad en sus relaciones sentimentales? Todas tuvieron dudas de si era conveniente una relación así (ellos lo tenían más claro). Pero también ganas de vivir y seguridad en sí mismas, igual que los hombres que no temieron emparejarse con ellas.