Renzi formaliza su dimisión en el PD pero sigue impidiendo cualquier pacto
Matteo Renzi ya no es de facto el secretario general del Partido Demócrata (PD) italiano. El ex primer ministro formalizó ayer su dimisión en la reunión de la ejecutiva de la formación que se celebró en la sede de Roma. De ahora en adelante, y hasta que se celebre un congreso para elegir al nuevo líder, el secretario interino es el ministro de Agricultura Maurizio Martina, hasta ahora vicesecretario.
Las primeras palabras de Martina como sustituto fueron ya una declaración de intenciones: “La secretaría ha presentado su dimisión, pero yo pienso que es importante que continúe trabajando junto a mí en estas semanas que nos separan de la asamblea”, dijo, según recoge la agencia Ansa.
Renzi se ha ido pero no sin antes dejar atado el papel que quiere que tenga el PD en las negociaciones de gobierno, que comenzarán a partir del 23 de marzo. “Les toca a otros, pero yo echaré una mano”, avisó en una entrevista premonitoria que publicó ayer el Corriere della Sera. “Nosotros estaremos donde nos han metido los electores: en la oposición”, repitió el ministro de Infraestructuras, Graziano Delrio. La consigna de Renzi ha quedado clara: nada de empujar al Movimiento 5 Estrellas (M5E), ganador de las elecciones, a formar gobierno. Tampoco a la Liga de Matteo Salvini. Su línea es que se entiendan entre ellos y que los electores vean si realmente son capaces de gobernar.
“El problema no es el odio que los grillini han sembrado. Son una experiencia política radicalmente diferente a la nuestra en valores, en democracia interna, en las vacunas, en Europa, en el concepto de trabajo, en el asistencialismo”, explica el expremier. También dice que esta vez su dimisión “no es una fake”, no se presentará a las primarias.
El fiasco electoral del PD les ha dejado en una posición muy comprometida. Tanto la coalición de centroderecha, ahora liderada por Salvini –aunque Berlusconi sigue dando órdenes–, como el M5E de Luigi Di Maio les miran para gobernar. A unos les faltan 49 nombres para la investidura. A los otros, 95. Y todos necesitan ayuda de los diputados del centroizquierda. “La gente os ha votado para gobernar, ahora hacedlo”, les ha retado Martina. Algunos dentro del PD estarían dispuestos a apoyar a los grillini. Falta ver si serán los necesarios y la influencia que Renzi seguirá teniendo. Ahora mismo es muy difícil.