Despedida de soltera mortal
Poderío, dinero, belleza y muerte trágica en la flor de la vida y en el apogeo de la fiesta. No es una telenovela turca sino el desgarrador accidente de un jet privado que ha segado la vida de ocho veinteañeras de la alta sociedad turca, a la vuelta de una despedida de soltera en Dubái. Todos los gastos corrían a cargo de Mina Basaran, hija de un constructor de yates y riquísima heredera, que debía contraer matrimonio el mes que viene en el palacio otomano de Çiragan, junto al Bósforo. Además de sus amigas, vinculadas a la moda, han fallecido también las dos pilotos y la azafata, en un vuelo íntegramente femenino en el que flotaban decenas de globos con forma de corazón. Vuelo que impactó abruptamente contra la cordillera iraní de Zagros, a las seis de la tarde del pasado domingo. El aparato había despegado de Sharjah, en Emiratos Árabes Unidos, y se dirigía de regreso a Estambul.
Los turcos –y no sólo ellos– siguen con atención esta horrible desgracia, con la fascinación añadida por el tren de vida de su joven élite económica. Entre las fallecidas se encuentran dos chicas con pasaporte español –además de turco– obtenido por su condición de sefardíes, antes incluso de la aprobación de la ley de Nacionalidad del 2015 (que el consejo de ministros decidió prorrogar un año el pasado viernes). Se trata de Liana Kalma Hananel y de Jasmin Baruh Siloni. La primera es la hija de otro destacado empresario, especializado en piezas para la industria del automóvil. Las dos jóvenes sefardíes debieron usar su pasaporte español para embarcar, por lo que el aeropuerto de Sharjah notificó que volaban seis turcas y dos españolas.
Al mando del aparato estaba Melikke Kuvvet, que fuera primera piloto de guerra de la Fuerza Aérea Turca. Kuvvet pidió a los controladores iraníes volar a baja altura y luego subió a una cota elevada –posiblemente para sortear una tormenta– antes de caer en picado con un motor en llamas –según testigos– durante tres mil metros, hasta estrellarse contra las nieves de Zagros, a cuatrocientos kilómetros al sur de Teherán.
Ya se ha encontrado la caja negra del avión, que debería permitir desentrañar el origen de la tragedia. Ayer, Turquía mandó un aparato para repatriar los cadáveres –dos de los cuales estaban calcinados– desde la capital de la provincia, Shahr-eKord, donde se encontraban ya los familiares a primera hora.
El jet accidentado, un Bombardier Challenger 604, pertenecía a Basaran, el holding familiar, que empezó hace más de ochenta años como pionero de la exportación de avellana y que actualmente cuenta con intereses en banca, construcción, hostelería y alimentación, entre otros sectores.
Mina, de veintiocho años, iba a contraer matrimonio con un empresario dentro de un mes , tras medio año de compromiso. La joven se sentaba en el consejo de administración de Basaran, grupo que parecía destinada a dirigir dentro de unos años.
Mina Towers, un complejo en construcción de seis rascacielos residenciales, lleva su nombre, ahora menos auspicioso para los mil quinientos pisos de lujo a la venta, en una ciudad, Estambul, con tantos multimillonarios como París.
Las jóvenes habían acudido a un concierto de la británico-kosovar Rita Ora en Dubái y se alojaban en un exclusivo hotel con playa privada, a seiscientos euros la noche. La anfitriona tenía decenas de miles de seguidores en las redes sociales y su última imagen la muestra junto al alegre grupo de amigas, en albornoz, en el lujoso spa del hotel. Mina Basaran había sido portada de Grazia por su “energía positiva y carrera ascendente que dará que hablar”.
Se da la circunstancia que Mina Basaran era amiga de Aslihan Dogan, que contrajo matrimonio este mismo domingo con el futbolista del FC Barcelona –cedido al Basaksehir– Arda Turan, en una ceremonia junto al Bósforo, con la presencia del presidente Erdogan y su esposa Emine como testigos. La mala noticia le fue ocultada a la novia para no amargarle la velada.
Conmoción en Turquía por la muerte de Mina Basaran, una rica heredera que da nombre a rascacielos
Entre las fallecidas hay dos sefardíes turcas con nacionalidad también española