Los taxistas vigilarán que Uber cumpla con la ley
El Ayuntamiento de Barcelona defiende poder restringir la circulación de VTC
Reestreno tranquilo de Uber ayer en Barcelona. La plataforma estadounidense regresó –esta vez con su servicio UberX, inicialmente con 120 coches de alquiler con conductores profesionales (VTC)– sin sacar de sus casillas a los taxistas, que mantuvieron la calma, aunque no ocultaron su enfado ante la irrupción de un competidor que consideran desleal y que practica el intrusismo. En el arranque de la que ven como la gran amenaza para su futuro, prefieren, al menos por ahora, aparcar las movilizaciones y vigilar que cumple la normativa. Además, el sector del taxi está a la espera de que se apruebe el reglamento metropolitano que prevé limitar la circulación de estos vehículos con chófer, un texto que el gobierno de la ciudad ayer volvió defender.
“Vienen a traer miseria y precariedad laboral, practican un capitalismo agresivo y salvaje”, denunció Alberto Álvarez, portavoz de Élite Taxi. “Vamos a seguir defendiendo a nuestras familias en la calle, en los despachos o donde haga falta”, añadió. Con todo, no se han previsto movilizaciones a corto plazo. “Estamos expectantes –prosiguió–, vamos a vigilar que Uber cumple la ley y no invade nuestra actividad”. Luis Berbel, del Sindicat del Taxi de Catalunya (Stac), considera que “lo que ahora toca es controlar que se respeta la normativa” y para ello exigió que la Generalitat y los ayuntamientos hagan las inspecciones pertinentes. Los taxistas insisten en que los VTC deben concertar sus servicios previamente y no pueden recoger a sus clientes en las paradas de taxi o sus inmediaciones ni tampoco circulando.
La jornada transcurrió sin incidentes destacables en la difícil convivencia entre taxistas y conductores de VTC. Sólo algunas discusiones aisladas, algo que viene siendo habitual en los últimos tiempos. Uber explicó que todo funcionó correctamente en su primer día de operación, al menos hasta el cierre de esta edición. El regreso de la plataforma a la capital catalana fue muy comentado en las redes sociales. La compañía no ofreció datos. Esperará a que pase cierto tiempo para hacer una valoración.
En el plano regulatorio, el Ayuntamiento de Barcelona volvió a defender su derecho a restringir la circulación de los VTC mediante un reglamento específico atendiendo a razones de congestión y de contaminación, una medida que el sector del taxi espera que sirva para acotar estos nuevos servicios . “Lo último que necesitamos es añadir más vehículos para un servicio que ya están prestando 10.500 taxis”, dijo la concejal de movilidad y presidenta del Institut Metropolità del Taxi (Imet), Mercedes Vidal. “Lo que queremos –añadió– es que se cumpla la ratio 1/30, que el Gobierno ahora no garantiza, y lo haremos amparándonos en las competencias municipales”. El Imet envió mensajes en las redes sociales en los que reivindicó “el taxi de toda la vida, el amarillo y negro”. El sector de los VTC, sin embargo, considera que esta nueva normativa desbordaría las atribuciones de los ayuntamientos y colisionaría con las del Ministerio de Fomento y la Generalitat. Por ello planean impugnarla ante los tribunales.
Mientras tanto, Madrid prevé mejoras para que el taxi compita con los VTC. Las entidades de taxistas y el gobierno regional pactaron ayer que varios clientes puedan compartir trayectos desde puntos de gran confluencia hasta la periferia y tarifas fijas para ciertos viajes.
Las entidades de taxistas piden más inspecciones para evitar el intrusismo de los nuevos servicios