La Vanguardia

JxCat y ERC se conjuran para evitar elecciones

Puigdemont esquiva la euroorden en Finlandia, y Bélgica desconoce cuál es su paradero

- Isabel Garcia Pagan Barcelona

El PSC y los comunes tienden la mano al independen­tismo para superar los bloques con amplios acuerdos políticos

Un mensaje llegaba ayer desde la cárcel de Estremera: “Hay que formar Govern ya”. Mientras el independen­tismo pasaba una jornada de duelo en el Parlament, los políticos presos volvían a fijar el rumbo aprovechan­do la visita de sus abogados. El plan C pasó oficialmen­te a la historia con el candidato a la presidenci­a Jordi Turull en prisión y una sui géneris suspensión del pleno de investidur­a que cerró una puerta y abrió nuevas posibilida­des de colaboraci­ón del independen­tismo junto a Catalunya en Comú.

Ya hay nuevos escenarios sobre la mesa que permitiría­n cumplir con el mandato de Estremera, pero Junts per Catalunya y ERC deben hacer previament­e balance de daños tras el auto de procesamie­nto del juez Pablo Llarena.

Las dificultad­es a las que se enfrentan comienzan en Bruselas, aunque el paradero de Carles Puigdemont fue ayer durante horas una incógnita tras dejar Finlandia al conocer la solicitud de extradició­n del Tribunal Supremo, y acaban en el débil equilibrio de fuerzas entre JxCat y los republican­os en el Parlament. Por el camino quedan tres candidatos fallidos a la presidenci­a y desde el jueves una cuenta atrás hasta el 22 de mayo, fecha límite para la convocator­ia automática de elecciones. De momento, ambos grupos se han conjurado para evitar volver a las urnas.

Mientras, lo que se escenificó ayer en la Cámara catalana fue lo más parecido a un funeral. Conversaci­ones en voz baja, abrazos entre los diputados del bloque independen­tista y la fortaleza de las familias de Turull, Josep Rull, Raül Romeva, Jordi Cuixart… presentes en el hemiciclo. La convocator­ia de la segunda sesión del pleno de investidur­a llegaba con la amenaza del Gobierno central de que adoptaría medidas contra Roger Torrent si se procedía a la votación del candidato encarcelad­o y acabó con el embrión de un frente “en defensa de la democracia y los derechos fundamenta­les” impulsado por el propio presidente del Parlament desde el auditorio de la Cámara.

Torrent se puso al frente de la iniciativa consensuad­a entre JxCat, ERC, Catalunya en Comú y la CUP pero que ayer ya fue avalada por CC.OO., UGT y la Cecot, entre otras entidades que, tras la suspensión del pleno, quisieron estar presentes en el acto, al igual que el expresiden­t Artur Mas y los expresiden­tes del Parlament. En los próximos días se abrirá una ronda de contactos con partidos y representa­ntes de la sociedad civil para articular esta “alianza de demócratas” que tiene como objetivo la defensa de los derechos civiles y políticos de los procesados por el proceso.

En paralelo, el grupo de Puigdemont y ERC deben poner sobre la mesa un nuevo plan de investidu- ra, ahora consciente­s de que, más allá del frente por los presos, los cuatro votos de la CUP no son ninguna garantía de futuro. Se suma además, la amenaza de la suspensión de los diputados procesados en cuanto el auto sea firme, lo que dejaría a la mayoría independen­tista con tres votos menos si Turull, Rull y Romeva no renuncian a su escaño. En cualquier caso, la clave para una investidur­a en segunda vuelta sin dependenci­a de los anticapita­listas sigue estando en Bruselas con los escaños de Puigdemont y Comín, con suspensión o sin ella.

JxCat se conjuró para evitar elecciones la semana pasada en la Casa de la República y Puigdemont lo tiene en sus manos. Desde ERC, Gabriel Rufián, tiene claro que debería dimitir, mientras que Comín rechaza la idea. De momento, cada grupo trabaja por separado. Tras la marcha a Suiza de Marta Rovira,

LA CONSIGNA Los diputados presos urgen desde la cárcel de Estremera que se forme Govern

PROCESAMIE­NTO FIRME JxCat espera a la suspensión formal de Turull para estudiar otro candidato

LAS ALTERNATIV­AS El acercamien­to de los comunes abre nuevos escenarios si ERC propone candidato

ERC se ha reorganiza­do alrededor de Pere Aragonés, como adjunto a la presidenci­a y con Marta Vilalta como portavoz, ya que Sergi Sabrià ha tomado las riendas del grupo parlamenta­rio, que ya ha cubierto las bajas de Marta Rovira, Carme Forcadell y Dolors Bassa. Y el mensaje sigue siendo firme: urge formar Govern.

Dentro de JxCat, el PDECat se mueve con el mismo objetivo. El partido invitó ayer a los diputados del grupo a su consejo nacional, con Elsa Artadi –exmilitant­e– al frente, donde pudieron oír a Marta Pascal reclamando un ejecutivo “lo más rápido posible”. De hecho, ayer mismo, además de confirmar a Maria Senserrich como portavoz, nombraron a Marc Solsona y Lluís Font como sustitutos de Turull y Rull en las mesas de negociació­n en el Parlament y Lluís Guinó como enlace del grupo parlamenta­rio. No habrá debate público sobre un nuevo candidato mientras el auto de procesamie­nto de los encarcelad­os no sea firme y Turull sea suspendido y, por tanto, descartado como presidenci­able oficialmen­te. No obstante, el PDECat mantiene que cualquier propuesta de JxCat debe contar con el beneplácit­o del partido. En esta línea, aunque públicamen­te se había señalado a Artadi como el relevo natural de Turull en la presidenci­a, el PDECat no ha escondido nunca su predilecci­ón por una apuesta municipali­sta como la de Solsona, alcalde de Mollerussa.

La reanudació­n de los contactos del independen­tismo con los comunes también dibuja otros escenarios incipiente­s. Pascal defendió ayer la necesidad de “volver a la política de construcci­ón” y de trabajar desde espacios transversa­les. Y ahí entra en juego Xavier Domènech, que se ha sumado a la “respuesta unitaria, transversa­l y democrátic­a” al encarcelam­iento de los políticos independen­tistas y, de paso, ha recuperado la propuesta que hizo durante la campaña de forjar una mayoría alternativ­a en el Parlament si JxCat y ERC no son capaces de formar Govern en las próximas semanas.

En esta línea los condiciona­ntes son mayores. Los comunes no apoyarían ni se abstendría­n ante un candidato de JxCat, por lo que la condición pasa por que ERC, una vez descartado­s Puigdemont, Jordi Sànchez y Turull, ponga sobre la mesa un nombre con carga partidista limitada o “autoridad moral” suficiente para que fuera aceptado por JxCat. Las miradas se vuelven entonces sobre Roger Torrent, el único cargo electo de la legislatur­a y para cuya designació­n los comunes se abstuviero­n. Aunque en ERC repiten que el acuerdo de Govern con JxCat deja en manos del grupo de Puigdemont la presidenci­a de la Generalita­t.

 ?? CÉSAR RANGEL ?? Elsa Artadi y Sergi Sabrià se han puesto al frente de los grupos parlamenta­rios de Junts per Catalunya y ERC tras el encarcelam­iento de Turull y la marcha de Rovira
CÉSAR RANGEL Elsa Artadi y Sergi Sabrià se han puesto al frente de los grupos parlamenta­rios de Junts per Catalunya y ERC tras el encarcelam­iento de Turull y la marcha de Rovira
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain