La Sagrada Família hace un simulacro sobre su seguridad
Los responsables de seguridad de la Sagrada Família realizaron el viernes por la noche un simulacro de seguridad del que no advirtieron a los vigilantes privados del templo. El ejercicio pretendía analizar la respuesta de los vigilantes ante una intrusión, tras los fallos en la seguridad que se produjeron el pasado 10 de marzo, cuando tres youtubers lograron acceder y salir del interior de la basílica. Fuentes de la Sagrada Família aseguraron que se trata en realidad de una auditoría de seguridad rutinaria como las que se efectúan cada mes.
La operación se realizó a las diez y media de la noche y se alertó previamente a los responsables de la Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra, pero advirtiéndoles que los vigilantes privados de la basílica no estaban al corriente de esta. El aviso a las policías tenía por objetivo que cuando las sala conjunta de Barcelona recibiera la alerta del 112 no dejaran de atender otros servicios en la ciudad, ya que se trataba sólo de un ejercicio para analizar la respuesta interna de los equipos de seguridad de la basílica. El aviso era oportuno después del revuelo provocado por la reciente intrusión protagonizada por los veinteañeros británicos, que lograron trepar por los andamios hasta una altura de entre 15 y 20 metros.
En su momento, el jefe de seguridad de la Sagrada Família, Marc Martínez, denunció que la primera patrulla de la Guardia Urbana tardó 40 minutos en llegar, un extremo que desmiente el informe que ya ha realizado la policía municipal, que ha cifrado el tiempo de respuesta en 14 minutos.