Profesionales de la sanidad se rebelan contra la exclusión de los simpapeles
La ley catalana de acceso universal quedará suspendida por un recurso ante el TC
Enfermeras, médicos de hospitales, de la atención primaria, gerentes sanitarios, responsables de centros de investigación, trabajadores sociales empleados del Servei Català de la Salut se han constituido en la Plataforma pel Dret Universal a la Salut contra la pérdida del acceso universal a los servicios sanitarios. Es una reacción que ellos mismos definen como “transversal” –aunque tiene todo el apoyo de los aparatos directivos– frente el recurso de inconstitucionalidad aprobado en Consejo de Ministros contra la ley catalana del 2017 que extendía el derecho a la asistencia a quienes vivieran en Catalunya, aunque no tuvieran papeles.
“Empezamos un pequeño grupo el miércoles y en seguida nos pusimos de acuerdo en los términos, muy sencillos y claros. No queremos esta regresión que pretende el Gobierno a los años 80, a antes de la reforma de Ernest Lluch, no queremos más pérdidas de derechos que ya estaban consolidados”, explican algunos de los miembros del grupo gestor, como Montserrat Dolz, Alba Brugués y Josep Ris.
El manifiesto, que ya han firmado más de 4.000 profesionales sanitarios a través de Change.org, afirma que la exclusión de una parte de la población a la atención sanitaria pone en riesgo la salud pública de toda la población y agrava la situación de los más vulnerables. Proclama que la ley de universalización recurrida (aunque aún no se ha hecho) es una obligación que deriva precisamente de la Constitución, del Estatut y de la ley General de Sanidad que se cargó el Real Decreto 16/2012 que aprobó el PP nada más llegar al Gobierno. Y que la cobertura sanitaria universal es un rasgo clave de un sistema de salud del que se sienten orgullosos y esencial para la cohesión social.
Esta reacción rápida y extensa se presentó públicamente en un acto que el Departament de Salut dedicaba ayer al Día Mundial de la Salud que se celebra hoy bajo el lema de la OMS “Salud para todos”. El acto oficial contó con el Síndic de Greuges, con un informe sobre salud y pobreza infantil y el unánime rechazo de colegios médicos, de enfermeras y de trabajadores sociales al recurso dictado por el ley catalana.
Todos insistieron en el retroceso social que suponía perder la universalidad en la asistencia y cómo la exclusión contravenía los preceptos deontológicos de los profesionales.
Y a pesar de que la máxima responsable del Departament de Salut es la ministra Dolors Montserrat, el director del Catsalut, David Elvira, aseguró durante el acto que “seguiremos atendiendo a todo el mundo”, haciendo así caso a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La lectura del manifiesto de la Plataforma del Dret Universal a la Salut al final del acto oficial levantó un largo aplauso de los presentes quienes minutos antes compartían en sus teléfonos la noticia de la salida de la cárcel alemana de Carles Puigdemont.
Un manifiesto de médicos, enfermeras y trabajadores sociales exige que se siga atendiendo a todos