El PNV llama a los soberanistas a centrarse en recuperar el Govern
“La prioridad tiene que ser restituir las instituciones catalanas”. El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, apeló ayer a la “responsabilidad” de los partidos independentistas para formar un Govern “legítimo” que acabe con la “situación actual de excepcionalidad”, un escenario en el que, advirtió, “es difícil mantenerse mucho más”. “Espero que vayan en la dirección correcta porque son los máximos interesados”, indicó el dirigente jeltzale.
Después de reclamar al Gobierno central que “deje de poner obstáculos en el camino del Parlament”, Ortuzar aconsejó a las formaciones catalanas que dirijan su acción política inmediata a recuperar el autogobierno y las instituciones propias a la vez que consideró que unas nuevas elecciones no iban a suponer una salida al conflicto, ya que “los resultados no cambiarían mucho y nos encontraríamos en la misma situación”.
El presidente del PNV explicó que los partidos soberanistas “viven en un río con dos orillas”: una, la de la “legitimidad democrática, la coherencia y el procés en sí”, y la otra, “ante una situación política tan deteriorada”, la de “recomponer” un Govern que responda a los comicios del 21-D. “Entre las dos –indicó– iría a esta última, porque desde ahí se puede construir todo, recuperar el tiempo perdido y buscar una alternativa política distinta manteniendo los objetivos”.
A su vez, Ortuzar reclamó a Madrid que abra “cauces de interlocución política con Catalunya” e insistió en que su partido no entrará a negociar los presupuestos del Estado mientras se mantenga el artículo 155. Sobre el primer trámite
El lehendakari insta a evitar unas nuevas elecciones catalanas, en una reunión con el presidente flamenco
parlamentario de las cuentas, el 26 de abril, el jeltzale vinculó la presentación de una enmienda a la totalidad a los “pasos políticos” que se den hasta entonces.
Ayer, el lehendakari Iñigo Urkullu, que se reunió en Vitoria con el presidente de Flandes, Geert Bourgeois, instó a que se constituya un Govern “estable y sólido” que evite unas elecciones que “nadie desea en Catalunya”. Ambos mandatarios pidieron “diálogo y una solución política”.