“Yo no hago política”
Pere Hernández, presidente de la Catalana, denuncia su cese en la Internacional
Pere Hernández (57), presidente de la Federació Catalana de Pàdel, apareció ayer en escena para desentrañar los argumentos que motivaron su cese como vicepresidente de la Federación Internacional.
“El 5 de septiembre del año pasado fui, como presidente de la Federació Catalana de Pàdel (FCP), a la asamblea del Comitè Olímpic Català. La foto de familia llegó a la Federación Española de Pádel y su presidente, Alfredo Garbisu, me pidió explicaciones –contaba ayer Hernández, en una comparecencia ante los medios–. Me pidió que dimitiese y me cesó telefónicamente como miembro de la Federación Española. Luego inició una serie de acciones para lograr que también la Federación Internacional (FIP) me cesase (era el vicepresidente)”.
La carta de despido de la FIP, cuyo contenido no ha trascendido, le llegó la semana pasada. Acompañado por Gerard Figueras (secretario general de Esport) y Gerard Esteva (presidente de la UFEC), Hernández reveló que Garbisu había presentado ante la FIP un escrito el 12 de octubre en el que pedía, “en nombre del CSD (Consejo Superior de Deportes), mi cese”, y que lo había hecho acogiéndose “a mi asistencia como representante de la FCP a aquella asamblea”. “Ahí inició una persecución contra mi persona, inventándose y certificando en nombre del pádel español una sanción que nunca existió y presionando a la FIP para que me retirara el cargo de vicepresidente”. “Pero yo soy un hombre de deporte, miembro de la familia olímpica, y nunca me he dedicado a hacer política”, continuó Hernández, campeón olímpico de pelota vasca en Barcelona’92, cuando se había disputado bajo la modalidad de exhibición.
“Según los estatutos de la FIP, cuando un directivo es sancionado debe dejar el cargo. Sin embargo, eso no ha ocurrido nunca. La FIP votó el asunto durante una asamblea. No salió mayoría absoluta y fui ratificado. Pero el presidente de la Española no lo aceptó y siguió presionando. Falseó cosas e intentó engañar a la FIP para que me cesase”.
Ateniéndose al artículo 19.9 de los estatutos de la FIP, el cese de Hernández es discutible. El estatuto sólo justifica el cese en caso de insolvencia, estar médicamente impedido o psíquicamente incapaz, condenado por delito criminal, en caso de dimisión, infracción de la confidencialidad, de haber sido suspendido por algún organismo nacional o internacional por un periodo superior a los noventa días o de haber sido destituido en una asamblea. Ninguno de esos supuestos concurre aquí.
“El presidente de la FCP tiene todo nuestro apoyo, es un dirigente y un deportista ejemplar. Pedimos diálogo y la voluntad de recapacitar por parte de las personas que han originado esta situación”, dijo Gerard Figueras. También Gerard Esteva manifestó su apoyo a Hernández: “Nos gustaría que el Comité Olímpico Internacional interviniera en una situación que ha generado la indefensión total de Hernández. La libertad de reunión y asociación es un derecho fundamental recogido en nuestra legislación y no puede generar discriminación”.
LOS ARGUMENTOS
“Garbisu, jefe de la Española, pidió mi cese de la FIP porque fui a un acto del Comité Olímpic Català”