Nuevas herramientas y más coordinación para la reindustrialización metropolitana
La Agencia Metropolitana de Desarrollo Económico será el instrumento clave para la dinamización de la economía metropolitana
La industria y sus servicios auxiliares constituyen el motor más sólido de la economía de la metrópolis y el sector que genera una ocupación de más calidad. Por este motivo, los 36 municipios apuestan por una salida de la crisis fundamentada en la reindustrialización y compartirán políticas que favorezcan la innovación tecnológica, la transferencia de conocimiento, la sostenibilidad, la productividad y el capital humano. Por primera vez desde la constitución del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), la metrópolis apuesta por una estrategia económica compartida y consensuada.
Esta brújula es el documento “Estrategia para la reactivación económica y la reindustrialización metropolitana de Barcelona”, presentado en una jornada técnica el pasado 22 de marzo en la sede del AMB. Plasma las conclusiones de la Mesa de Reactivación Económica y Reindustrialización, que reúne 400 agentes económicos clave del territorio, tanto públicos como privados: administraciones, técnicos y expertos, universidades y centros de investigación, patronales, sindicatos… Durante meses han perfilado juntos cuáles son las prioridades que deben dirigir las políticas de promoción económica y creación de ocupación, y ahora estrenan unas nuevas herramientas de alcance metropolitano que favorecerán que se ejecuten con mayor coordinación y más recursos. Una definición más inclusiva de industria ha permitido incorporar a la estrategia actividades del sector terciario que están directamente vinculadas con esta, como la logística, el packaging, la comercialización y la publicidad.
Una de las prioridades compartidas es mejorar los polígonos industriales. El programa de ayudas del AMB subvenciona desde 2014 proyectos de mejora de la eficiencia energética, las infraestructuras y la movilidad. Las ayudas cubren hasta el 70 % de la inversión, y cuando concluya el programa vigente, a finales de 2018, habrán beneficiado a un centenar de actuaciones y habrán generado un millar de puestos de trabajo directos. La inversión total superará los 40 millones de euros. Se tiene también en perspectiva un nuevo instrumento de promoción conjunta: una web unitaria para los polígonos del área metropolitana que detallará las actividades, la infraestructura y el planeamiento de cada uno para facilitar la captación de nuevas empresas y emprendedores.
También tendrá una web propia la economía circular metropolitana, una dinámica de producción sostenible en expansión. Se trata del aprovechamiento de los residuos de la actividad industrial como recursos valiosos, gracias a la tecnología y a la eficiencia energética. Un nuevo portal inventariará los recursos circulares existentes en los distintos municipios para ayudar al tejido productivo a poner en valor los materiales y reducir el derroche. NUEVOS INSTRUMENTOS PARA EL NUEVO SIGLO La articulación de estrategias conjuntas exige unos instrumentos de coordinación que la metrópolis no tenía hasta ahora. Por este motivo, uno de los frutos directos de la Mesa es la creación de la Agencia Metropolitana de Desarrollo Económico, que apoyará a los municipios en la dinamización local y cooperará con el sector privado y con el resto de las administraciones en la promoción exterior. A petición de los agentes sociales representados en la Mesa, la nueva Agencia centrará su atención en la atracción de inversores internacionales, la ayuda a la innovación y el impulso del mercado de trabajo. “Ya no habrá excusa para que dos municipios vecinos no coordinen sus políticas”, señala Jaume Collboni, vicepresidente del Área de Desarrollo Social y Económico del AMB. De hecho, la Agencia “es una réplica de lo que ya existe en grandes ciudades como Londres, Lyon o Ámsterdam”, que coordinan desde hace años las políticas económicas de sus áreas metropolitanas, explica. La suma de esfuerzos y la doble vertiente micro y macro, añade Collboni, ayudarán a “proyectar internacionalmente el área metropolitana” bajo un paraguas común.
Otra herramienta destacada de coordinación será la Red de Centros de Innovación Metropolitana. Con este espacio el AMB ofrecerá un servicio de asesoría tecnológica a los municipios y promoverá la creación de espacios de innovación o Fab labs a escala metropolitana. La metrópolis ya dispone de potentes proyectos de innovación que han evidenciado su utilidad para la ciudadanía y para las empresas pequeñas y medianas. Algunos de ellos son el laboratorio colaborativo Citilab de Cornellà, la incubadora de tecnología espacial ESA BIC en el campus universitario de Castelldefels o el Innobus Metropolitano, que pone en contacto a los jóvenes licenciados con las empresas punteras.