CAMBIAR EL DORSAL.
Ceder el dorsal a un corredor mejor preparado para recuperarlo unos pocos kilómetros antes de la línea de meta y poder hacer así postureo tras la llegada, luciendo una buena marca.
Ceder el dorsal a un corredor mejor preparado para recuperarlo unos pocos kilómetros antes de la línea de meta y poder hacer así postureo tras la llegada, luciendo una buena marca.