TMB jubilará 449 buses diésel para sustituirlos por híbridos
Los autobuses diésel de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ya tienen fecha de jubilación. Entre el 2024 y el 2026 se retirarán los vehículos más contaminantes que sigan circulando y toda la compañía estará integrada por autobuses híbridos, eléctricos o de gas natural.
El horizonte de renovación hacia una flota sin presencia exclusiva del combustible clásico tiene un impulso destacado este mismo año. Se prevé la adquisición, en diferentes remesas, de hasta 254 autobuses nuevos durante el 2018, lo que supondrá la retirada del mismo número de vehículos diésel. “A finales de año, alrededor de la mitad de la flota será sostenible”, asegura el consejero delegado de TMB, Enric Cañas.
Hasta el 2020 está previsto incorporar un total de 449 unidades nuevas al parque de autobuses de TMB, todas ellas híbridas, eléctricas o de gas. Según los datos de la compañía, para entonces se habrá pasado de los 205 autobuses híbridos que hay actualmente a 393. Estos modelos que combinan un motor de combustión diésel y otro eléctrico serán los mayoritarios. El número de eléctricos puros que ahora se limita a 4 pasará a ser de 56 y la flota de gas se mantendrá alrededor de las 380 unidades.
La inversión este año es de 42,3 millones de euros y el coste estimado del proceso de renovación de los 449 autobuses en cuatro años se sitúa en 125 millones. A esta cifra hay que sumarle la inversión necesaria en infraestructura eléctrica para adaptar las cocheras al nuevo tipo de vehículos.
Con la retirada de los diésel y la llegada de nuevos autobuses menos contaminantes, TMB calcula que en cuatro años se reducirán 27.900 toneladas de CO2. Se vaticina que las emisiones generadas por los autobuses barceloneses en el 2020 serán un 15% inferiores a las del 2015.