Barcelona, de novela global
El día que el Dan Brown visitó de incógnito la Sagrada Família, buscando inspiración para su novela Origen, tuvo claro que la escalera de una de las torres sería un escenario idóneo. Mientras bajaba por aquella escalera de caracol tan empinada se imaginó una pelea en la oscuridad de trágico final. Otro día visitó el supercomputador Mare Nostrum en la UPC y al descubrir que está en el interior de una antigua capilla comentó: “La realidad siempre supera la ficción”.
Hay muchas rutas literarias de Barcelona, las más conocidas las que surgen de La sombra del viento de Carlos Ruiz Zafón o La catedral del mar de Ildefonso Falcones. Pero ayer una decena de corresponsales de los principales medios de comunicación extranjeros pudieron descubrir los secretos barceloneses de la última novela de Dan Brown. Periodistas de Le Monde, The New York Times, Frankfurter Allgemeine, Asahi Shimbun, Monocle, la agencia rusa Ria Novosti, la televisión pública alemana ARD, France 24, The Times e Il Messaggero han pasado este fin de semana de Sant Jordi en la capital catalana invitados por la asociación Barcelona Global. Y si el sábado tuvieron un encuentro con representantes del mundo editorial, ayer por la mañana lo dedicaron a la Barcelona de Brown. Por la tarde acudieron a la fiesta de La Vanguardia y cerraron el día con una cena privada compartida entre otros con María Dueñas, Javier Cercas, Benedetta Tagliabue e Isabel Coixet.
Para estos corresponsales que en el último año han venido a Barcelona varias veces siempre por motivos políticos fue una sorpresa descubrir la buhardilla abovedada de Gaudí en La Pedrera que Brown convierte en apartamento de un millonario. En la Sagrada Família fotografiaron el criptograma de la puerta de Subirachs que según el novelista norteamericano es un código secreto masónico. En el centro de supercomputación, su director Josep M. Martorell les explicó que Brown situó un ordenador cuántico encima del supercomputador. “Hoy es una ficción pero no es descabellado”.
Esta Barcelona del Sant Jordi supone otra inmersión, la de la imaginación y el talento de una ciudad global y compleja. VEA EL VÍDEO DE LA VISITA A LOS ESCENARIOS DE DAN BROWN
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