¿Cómo podría afectarnos aquí el brote actual?
La situación del brote actual de enfermedad por virus Ébola (EVE) en la RD Congo es, como muchas de estas situaciones al inicio, incierta. La aparición de un caso confirmado en una ciudad próxima a la zona original del brote introduce un elemento de preocupación adicional. El aislamiento y tratamiento de los casos (enfermos), el seguimiento de los contactos de estos casos y las prácticas funerarias seguras en personas fallecidas por la EVE son los pilares básicos del control de la EVE, a los que cabe añadir ahora la vacuna que se va a ofrecer a los contactos y al personal sanitario.
Los análisis de riesgo indican que este es muy bajo para toda la UE. La OMS no recomienda ningún tipo de restricción de viajes (ni de personas ni de mercancías) desde y hacia la RD Congo. Tampoco recomienda establecer controles de entrada en los países que reciban viajeros procedentes de esta zona. Únicamente recomienda realizar controles de salida de la RD Congo y especialmente controles de salida o paso en el río Congo, una vía principal de comunicación en esta ocasión.
Catalunya, España y la UE están mejor preparadas que en el 2013, antes de la gran epidemia de ébola del oeste de África, para hacer frente a un posible caso de EVE importado (situación hoy altamente improbable) y ante la eventualidad de repatriar a cualquier profesional sanitario o cooperante que lo precise. El Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad coordina la gestión de la información y la respuesta ante situaciones de alerta o emergencia sanitaria. La Agència de Salut Pública de Catalunya está en contacto permanente con dicho Centro. Las Unidades de Aislamiento de Alto Nivel existentes en España (en Catalunya la Unidad conjunta Hospital Clínic – Hospital de Sant Joan de Déu) disponemos de planes de preparación y respuesta para hacer frente a esta situación. Esperamos no tener que intervenir nunca, pero estamos preparados para hacerlo siempre que sea necesario. Todos los profesionales implicados trabajamos coordinadamente para garantizar la seguridad de la población.
El sentimiento más fuerte del hombre es el miedo, y el peor miedo es el miedo a lo desconocido. Conocemos mucho mejor esta enfermedad y cómo controlarla que hace cinco años. No será fácil y la situación en la zona original puede complicarse. Aquí hay que mantener siempre la calma, seguir la situación día a día y ayudar en todo aquello que podamos a los profesionales sanitarios que se enfrentan a la EVE sobre el terreno.
La posibilidad de que lleguen casos de la enfermedad a la UE es en estos momentos altamente improbable