Rajoy bloquea el Govern con el apoyo de PSOE y Cs
OeEl jefe del Ejecutivo mantendrá el 155 y estudia si puede haber consellers presos oePuig y Comín dicen que dimitirán si no pueden ejercer desde Bruselas
Los presidentes del Gobierno y de la Generalitat se han instalado en un pulso que ayer tuvo como resultado la orden de Mariano Rajoy –con el amparo del 155 y el apoyo de los líderes del PSOE y Cs– de bloquear la publicación en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC) del decreto de Quim Torra por el que nombra a los miembros del Govern. Aunque el deseo es poner fin a la intervención de la Generalitat, la Moncloa se empeña en recordar al nuevo president que debe cumplir la Constitución y las leyes y que tiene resortes para obligarle a ello. Mientras no se publique el decreto, los consellers no podrán tomar posesión, con lo que el 155 seguirá vigente. El pulso sigue mientras se acerca la crucial votación en el Congreso, el miércoles, de los presupuestos del Estado.
Rajoy se mostró prudente cuando
SÍ AL NUEVO ORGANIGRAMA La Moncloa sí publicará el decreto que fija las conselleries y sus competencias
PROVISIONAL
El Ejecutivo se da tiempo para ver si es viable un Govern con presos y desplazados
Torra fue designado por Carles Puigdemont, y ante su discurso independentista en la investidura: “Le juzgaré por los hechos”, dijo. Le parecían provocaciones, pero las palabras no delinquen, dicen en el Ejecutivo. Así que esperaron a los hechos y el primero fue la designación del Govern, basado en la máxima de restituir a consellers huidos o en prisión (cuatro, ya que los demás declinaron la invitación).
La situación no gustó nada a Rajoy, que ya el sábado, al conocerse la composición del nuevo Govern, emitió un comunicado en el que consideraba “una provocación” la inclusión de dos consellers en la cárcel (Jordi Turull y Josep Rull) y otros dos huidos de la justicia española (Toni Comín y Lluís Puig) y anunció que estudiaría la viabilidad del gabinete anunciado.
Ayer, el secretariado del Gobierno, órgano de apoyo del Consejo de Ministros, de las Comisiones Delegadas del Gobierno y de la Comisión General de Secretarios de Estado y Subsecretarios, emitió un pri- mer informe, que fue comunicado inmediatamente a la Generalitat, en una carta remitida por el subsecretario de la Presidencia del Gobierno central, José María Jover, al secretario del Govern, Víctor Cullell.
De los dos decretos firmados por Torra el sábado para la designación del Govern, el Ejecutivo central admite la publicación de uno de ellos, el que fija la creación y la denominación de las conselleries, así como sus competencias. No hay objeción al del organigrama del Govern, y se publicará. Pero el Gobierno no piensa lo mismo del segundo decreto, que designa a los consellers.
En la carta, Jover le explica a Cullell que el Gobierno central se tomará más tiempo para analizarlo, antes de dar vía libre a su publicación, o impedirla, por la inclusión de Turull (Presidència) y Rull (Territori), en prisión, y de Comín (Salut) y Puig (Cultura), huidos en Bélgica. Así que no permite que se publique el decreto de nombramiento, lo que afecta a todos los consellers.
Es más, el Gobierno recuerda a Torra que “la publicación del citado acuerdo (en el DOGC) requiere la autorización del Gobierno de la Nación” . El 155, pues, sigue vigente.
La negativa a publicar el nombramiento de los consellers no es definitiva, sino provisional, mientras los servicios jurídicos del Estado estudian si se puede invalidar el nombramiento de los cuatro consellers citados. Sobre los demás, el Gobierno no tiene ningún problema.
Hay dudas jurídicas sobre el nombramiento de estos cuatro, porque su encarcelamiento no les priva de sus derechos políticos, pero en su situación no podrán ejercer su cargo. El Gobierno decidirá en los próximos días si impide definitivamente la publicación, lo que se anunciará con argumentos jurídicos, o si permite que los nombramientos se plasmen en el DOGC.
No sería el último cartucho que tendría el Gobierno para impedir que los cuatro consellers cuestionados formen parte del Govern. El artículo 155 seguirá vigente hasta la toma de posesión y el Gobierno no contempla más posibilidad que una toma de posesión presencial, lo que hace imposible que los consellers que viven en Bruselas puedan llegar a ocupar su cargo, y los que están en la cárcel necesitarían del permiso del juez. Cualquier otra posibilidad que pretenda Torra será recurrida.
Aunque el PNV condicionó al levantamiento del 155 en Catalunya su apoyo clave y definitivo a los presupuestos del Estado en la votación del miércoles, el Gobierno no está solo en la decisión de prolongar la intervención de la Generalitat. Rajoy obtuvo el apoyo previo de Pedro Sánchez y de Albert Rivera, antes de anunciar que congelaba los nombramientos de Torra. El presidente del Gobierno llamó el sábado por la noche al secretario general del PSOE y al presidente de Cs, y ambos estuvieron de acuerdo con Rajoy.
Ayer la secretaria de Igualdad del PSOE, Carmen Calvo, que negoció con el Gobierno el 155, calificó de “inaceptable” que el nuevo president “que ha sido investido porque sí cumple los requisitos, ahora pretenda que no los cumplan algunos de sus propuestos para consejeros”, pero se mostró convencida de que Rajoy y Sánchez “encontrarán la respuesta que necesita este capítulo de la defensa de la democracia y el Estado constitucional”.
Cs, partidario de mantener el 155, considera una buena decisión la negativa a publicar el decreto de nombramientos, y seguirá apoyando al Gobierno en todo lo que impida que Torra restituya lo que tenga que ver con el proceso secesionista.