Urania Mijaliokaos
Yanis Butaris, de 75 años, sufrió patadas y puñetazos en un acto conmemorativo
Urania Mijaliokaos, hija del líder del partido neonazi Aurora Dorada, ha aplaudido la agresión ultraderechista al alcalde de Salónica. Yanis Butaris, de 75 años, recibió patadas y puñetazos de energúmenos en un acto conmemorativo.
El alcalde de Salónica, la segunda ciudad de Grecia, tuvo que ser hospitalizado la noche del sábado tras sufrir una agresión por ultraderechistas ofendidos por su presencia en un acto conmemorativo.
Yanis Butaris, de 75 años, fue atacado por una turba violenta cuando asistió a una ceremonia de arriada de bandera en conmemoración de lo que los griegos llaman “genocidio póntico”, la masacre de griegos otomanos del mar Negro a manos de los turcos durante la Primera Guerra Mundial y la consiguiente guerra greco-turca.
El alcalde, una figura controvertida de la política griega y conocido por su firme posición antinacionalista, tuvo que ser sacado del acto bajo escolta. En las imágenes se ve cómo los participantes, con evidente estética ultra, comienzan a rodearle y a increparle. Cuando Butaris ya se marcha, le empiezan a tirar botellas y otros objetos. En un momento el alcalde cae al suelo, donde algunos energúmenos le siguen agrediendo. Cuando por fin logra subirse al coche, aún intentan romper los cristales.
“Me golpearon por todas partes, patadas, puñetazos, de todo –explicó a la agencia de noticias griega ANA–. Fue un ataque despreciable pero estoy bien”. Sufrió lesiones en la cabeza, la espalda y las piernas.
La oficina del primer ministro, el izquierdista Alexis Tsipras, atribuyó el ataque a “gamberros de extrema derecha”. La policía anunció la detención de dos sospechosos, un griego de 20 años y un griego originario de Georgia de 36 años y con antecedentes.
El partido de Tsipras, Syriza, rechazó el “intento fascista de apuntar e intimidar al alcalde”. El partido opositor conservador Nueva Democracia también lo condenó.
Por si había dudas de las simpatías de los atacantes, Urania Mijaliokaos, la hija del líder del partido neonazi Aurora Dorada, acusó a Butaris de ser “antigriego” y de haber ido a “provocar”. En varios mensajes en Twitter, la joven aplaudió a los agresores y lamentó no haber estado allí. “Bravo para todos los que han cumplido hoy con su deber en Salónica. Respeto y mil bravos”, escribió la hija de Nikos Mijaloiakos.
Butaris no es un político al uso. Es un empresario –pertenece a una de las más importantes dinastías vinícolas del país– que en el 2010 fue elegido como independiente a la alcaldía de Salónica, ciudad del norte de Grecia.
Es un ferviente defensor del pasado multicultural de la ciudad y ha irritado a menudo a los extremistas por sus declaraciones sobre temas sensibles como Macedonia, Turquía o Israel.
En el 2014, cuando fue reelegido para un segundo mandato con un 58,1% de los votos, asistió a la investidura con una estrella de David amarilla en la solapa. Era todo un mensaje, ya que Aurora Dorada acababa de obtener el 7,7% y tenía por primera vez a dos concejales en el ayuntamiento.
Durante su mandato ha impulsado muchos monumentos en memoria de los judíos de Salónica y la recuperación del legado. El 90% de la población judía sefardí de la ciudad fue exterminada durante la ocupación nazi en la II Guerra Mundial. No es casualidad que una de las primeras condenas del ataque a Butaris llegasen de la embajada
La hija del líder del partido neonazi Aurora Dorada felicita a los agresores del edil por “antigriego”
israelí en Grecia, que deseó al alcalde una pronta recuperación.
Butaris ha sido asimismo una de las voces que más han defendido en Grecia el diálogo con Skopie para resolver la disputa sobre el nombre del país vecino (ver información abajo). En Nochevieja, invitó al primer ministro macedonio, Zoran Zaev, a cenar a Salónica. Ha suscitado gran polémica su propuesta de cambiar el nombre del aeropuerto de la ciudad, que se llama Macedonia, para limar asperezas con los vecinos.
Los ultranacionalistas también le acusan de simpatías con los turcos. No le perdonan que haya calificado de “gran líder” a Kemal Ataturk, el padre de la Turquía moderna y nacido en 1881 en Salónica, que pertenecía entonces al imperio otomano. Según la prensa turca, el alcalde propuso incluso poner el nombre de Ataturk a una calle del centro de Salónica.