A juicio la paliza mortal en una discoteca de Girona
Los dos acusados de propinar una brutal paliza a un joven a las puertas de la discoteca Caribbean de Girona en el 2016 se sientan estos días en el banquillo de la Audiencia de Girona donde son juzgados. Se enfrentan a una pena de 21 años de cárcel cada uno por un delito de asesinato. Ayer declararon testigos de la agresión, entre los que se encontraban amigos de la víctima y de los acusados, que entraron en numerosas contradicciones respecto a las declaraciones que habían realizado en la fase de instrucción.
Los compañeros del difunto, que aquel día estaban con él en la discoteca, explicaron que fue una deuda de 50 euros la que desencadenó la agresión mortal. Manifestaron que una semana antes el fallecido recibió el encargo de comprar un gramo de cocaína y que tras pagar 50 euros a un joven marroquí nunca recibió la droga. Una semana después la víctima volvió a coincidir con él en la discoteca y volvió a insistir para que le devolviera el dinero.
Uno de los testigos de la agresión y amigo de la víctima que declaró por videoconferencia dijo que lo comenzó siendo una discusión verbal con el presunto deudor en el interior de la discoteca acabó con una agresión protagonizada por dos amigos de este. “Le pegaron puñetazos y le patearon la cabeza y costillas. Le pegaron donde más daño le podían hacer”, explicó.
Una versión totalmente opuesta es la que dio el supuesto deudor, que ayer negó que vendiera droga y que hubiese
Amigos de la víctima declararon que una deuda de 50 euros fue el detonante de la agresión
recibido dinero alguno y aseguró que solamente vio a uno de los dos acusados pelearse con la víctima. Los dos acusados declararán el próximo lunes. Sus defensas piden dos años de cárcel para uno de ellos por homicidio imprudente y la absolución para el otro