Hallados dos depósitos más de pólvora y el propietario vuelve a ser detenido
Malestar en Tui con el proceder de la juez y la falta de control de la Guardia Civil
Francisco González Lameiro comparecerá esta mañana por segunda vez en cuatro días ante la titular del juzgado de instrucción número 1 de Tui. Como el viernes, lo hará tras ser detenido por la Guardia Civil en su condición de propietario del depósito clandestino de la aldea de A Torre que estalló el pasado miércoles, provocando 2 muertos y 37 heridos. Pero esta vez este empresario, dueño de la clausurada pirotecnia La Gallega, también entrará en el juzgado como el investigado que le mintió a la magistrada, al negar la existencia de más almacenes como el del siniestro, y como el titular de una red de zulos distribuidos, al menos, por el término municipal de Tui, y de la que se desconoce su dimensión.
En estas circunstancias, fuentes próximas al caso dan por hecho que Lameiro ingresará hoy en prisión, con un desenlace radicalmente diferente al del pasado viernes, cuando salió por su propio pie del juzgado sin fianza y con la única obligación de comparecer cada quince días. Según Europa Press la Fiscalía solicitará hoy la prisión provisional.
Durante los registros del fin de semana, cuando la Guardia Civil intervino dos depósitos ilegales de material pirotécnico que se unieron al del estallido, a González Lameiro se le veía totalmente abatido, manteniéndose en pie gracias al apoyo de personas de su familia. El estado de ánimo de este hombre que fue detenido por primera vez el mismo miércoles por la tarde reflejaba los avances de la investigación y la difícil situación en la que se halla ahora mismo el encausado, que ayer fue arrestado de nuevo por la Guardia Civil, como paso previo a que a primera hora de hoy sea puesto a disposición judicial.
“La primera vez que compareció ante la juez los presuntos delitos que se le atribuían no eran lo suficientemente graves como para poder decretar la prisión preventiva”, apuntaron ayer fuentes cercanas a la investigación, que remarcaron que ahora el panorama resulta muy diferente, pues no sólo se ha comprobado la falsedad de su primer testimonio, en el que según esta versión habría afirmado ante la juez que no tenía más depósitos, sino que se desconoce el tamaño de la red de almacenes con explosivos con la que trabajaba después de que en el 2015 se clausurasen las instalaciones de su pirotecnia por carecer de licencia urbanística.
Hay vecinos de las zonas próximas a los depósitos que sostienen que puede haber más y que en ellos no sólo se hacía acopio de los productos con los que se fabrica la pólvora, sino que también se manipulaban,
Técnicos municipales elevan a 26 las casas destruidas; hay otras 49 muy afectadas y 43 con el techo dañado
lo que genera un peligro añadido. En Tui se percibe estos días malestar social con la decisión de la juez de dejar en libertad al encausado y también con la Guardia Civil, por no detectar unas actividades clandestinas tan potencialmente peligrosas.
Entretanto, el ayuntamiento continúa evaluando los daños. Los técnicos municipales elevan ahora a 26 las casas destruidas, frente a la decena de la que se habló inicialmente. Hay otras 49 muy afectadas y 43 con el techo dañado.