Olivas cuestiona al Banco de España en la salida a bolsa de Bankia
El exvicepresidente de Bankia y expresidente del Banco de Valencia José Luis Olivas echó ayer balones fuera en la comisión de investigación de la Crisis Financiera en el Congreso desvinculándose de responsabilidades en la salida a bolsa de Bankia. El directivo, que se encuentra investigado por la Audiencia Nacional, rechazó las acusaciones que se vierten sobre su persona y defendió que Bankia salió a bolsa “con todos los beneplácitos del mundo”. A lo que añadió: “Si nos hemos equivocado, nos hemos equivocado muchísimos”, señaló.
Olivas cuestionó reiteradamente las funciones del supervisor. En un primer momento, defendió que Bankia realizó dos semanas después de la salida a bolsa un ajuste mayor de lo exigido por el supervisor: 9.207 millones frente a 8.040 millones. Después, detalló que la salida a bolsa fue “un proceso monitorizado y controlado absolutamente por el Banco de España”. En este sentido, afirmó que el supervisor contaba con unos 15 ó 20 inspectores “permanentemente siguiendo a Bankia” y que se celebraban reuniones semanales con altos ejecutivos para controlar aspectos como la liquidez, el riesgo de mercado o las dotaciones de la entidad.
Olivas culpabilizó a más agentes implicados y enumeró a las agencias de calificación, a los bancos de inversión, a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), a las auditoras y hasta a las autoridades europeas.
Respecto del Banco de Valencia, Olivas cuestionó la inyección de 5.000 millones que recibió de dinero público. Sugirió que CaixaBank se beneficio de estas ayudas tras comprarla por un euro. Defendió que Banco de Valencia contaba con unos recursos propios de 1.200 millones con los que podría haber hecho frente a los más de 500 millones que tenía en déficit de provisiones, detectados tras una inspección en el 2011.