Uber entra en el mercado europeo de bicicletas compartidas
Uber, la empresa de transporte de pasajeros a través de una aplicación digital que ha sido proscrita en varias ciudades europeas, lanzará su servicio de bicicletas eléctricas compartidas Jump en Alemania en un intento por diversificar y construir puentes con las autoridades locales.
El presidente ejecutivo de Uber, Dara Khosrowshahi, hizo el anuncio en una conferencia en Berlín mientras decenas de conductores alemanes de taxis protestaban en el exterior del recinto con pancartas donde ponía “Uber, vete a casa”. “Quiero que esto señale un profundo compromiso con Alemania”, comentó Khosrowshahi, quien salió a escena con una bicicleta Jump roja.
“Alemania es un poco una señal de lo que puede ser la nueva Uber... Queremos trabajar con gobiernos locales y ciudades para hacer que nuestro modelo funcione”, agregó. Uber ha tenido problemas en Europa, donde manifestaciones pasadas de conductores de taxis tradicionales han acabado en situaciones violentas y prohibiciones judiciales que la han forzado a cerrar algunos de sus servicios en Alemania, Francia, Italia, España y Bélgica. Además, Uber y otras empresas de transporte a través de una aplicación digital han sido acusadas de provocar congestión en grandes ciudades, como Londres.
Uber compró Jump como parte de un intento de convertirse en la aplicación de referencia para el transporte urbano, ya sea mediante autobuses, bicicletas, automóviles o incluso trenes, permitiendo que los usuarios programen viajes a través de una serie de servicios.
El de las bicicletas eléctricas es un sector en eclosión, no tanto por los grupos estadounidenses (en San Francisco Jump tiene poco más de 250 unidades), como por la aparición de importantes competidores chinos en el mercado global.