El temor a otra guerra mundial debe frenar disputas globales, avisa Putin
El líder ruso asegura que Occidente ya ve que las sanciones perjudican a todos
Vladímir Putin siguió lanzando ayer mensajes a la Unión Europea, insinuando que ya hay países que hablan abiertamente de levantar las sanciones contra Rusia. Pero también tenía mensajes para Estados Unidos, a quien en Moscú se considera principal responsable de la “rusofobia”. El presidente de Rusia aconsejó que las grandes potencias del mundo “eviten” dar “pasos peligrosos” que conduzcan a una gran confrontación. Una tercera guerra mundial significaría el fin de la civilización, advirtió.
“Da la sensación que Rusia es culpable literalmente de todo, la sensación de que no se escuchan nuestros argumentos”, se quejó el mandatario ruso durante su programa anual Línea Directa con Vladímir Putin, que se celebró ayer por decimosexta vez y se emitió por la televisión estatal. “Las sanciones se aplicaron porque se ve a Rusia como una amenaza, como un rival”, señaló. En el programa, que ayer duró algo más de cuatro horas, Putin contesta desde el estudio a las preguntas que envían los ciudadanos rusos o con los que se contacta en directo. “Es una política equivocada. No se debe arrinconar a Rusia, sino crear cooperación. Sería bueno para la economía mundial. Y poco a poco esto se está comprendiendo”, aseguró.
Sin mencionar a los Veintiocho, Putin señaló que algunos países occidentales hablan ahora abiertamente, y no “al oído” como antes, de levantar las restricciones, sobre todo en medio de la guerra comercial con EE.UU. Esta semana el presidente ruso se ha mostrado “totalmente dispuesto a colaborar” con la UE. Fue durante su viaje a Austria, el principal abogado de Rusia dentro de la Unión y donde incluso uno de los socios de Gobierno, el Partido de la Libertad (extrema derecha), pide abiertamente el fin de las sanciones económicas contra Rusia.
“Creemos que la introducción unilateral de todo tipo de sanciones no resuelve los problemas, sólo los empeora”, aseveró. Las relaciones entre Rusia y la comunidad occidental empeoraron hasta poder compararse con la guerra fría en el 2014. Los países occidentales comenzaron a aplicar sanciones a Moscú tras la anexión de la península de Crimea. El conflicto en el este de Ucrania, luego la implicación de Rusia en la guerra de Siria y más recientemente el envenenamiento del exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija en Reino Unido han seguido complicando la situación.
“¿Habrá tercera guerra mundial?”, le preguntaron a Putin.
Para responder, el líder ruso echó
EE.UU. quiere romper el equilibrio mundial, pero Rusia se lo está impidiendo, asegura el jefe del Kremlin
mano de una cita de Albert Einstein: “Yo no sé qué armas se usarán en la tercera guerra mundial, pero en la cuarta serán palos y piedras”. Putin afirmó que “entender que esa guerra será el fin de la civilización debería disuadir a todos de dar pasos extremos en la arena internacional que son altamente peligrosos”.
Los conflictos locales, por supuesto que suceden, dijo Putin, pero no ha habido una guerra global. Según él, Estados Unidos está intentando romper el equilibro, pero Rusia está respondiendo y se mantiene ese equilibrio, añadió. “Es hora de sentarse a la mesa de negociaciones”, resumió Putin.
Este año Putin recibió casi dos millones de preguntas a través de SMS, MMS o videollamada. Al contrario que en ocasiones anteriores, la emisión de este año se ha hecho sin público, que también preguntaba en el mismo estudio. Para compensarlo, participaron ministros del Gobierno y gobernadores regionales, a los que el presidente trasladó algunas preocupaciones de los ciudadanos rusos. La mayoría de las preguntas iban dirigidas a problemas locales y economía interna, como la subida del precio de la gasolina; pero también a la demografía, las hipotecas para jóvenes familias, el recientemente inaugurado puente de Crimea o los hipotéticos planes del jefe del Kremlin para reunirse con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.