Podemos apuesta por dar tiempo a Sánchez
Podemos reunió ayer a su gabinete en la sombra, llamado Rumbo 2020 (y que ayer contó con presencia de representantes de En Marea, En Comú e Izquierda Unida ), para analizar –y celebrar– el nuevo paisaje tras la moción de censura y el cambio de Gobierno.
En el diagnóstico de lo ocurrido, según fuentes presentes en el debate, es compartida la certidumbre de que la moción de censura y la salida de Mariano Rajoy de la Moncloa es un éxito de la estrategia planteada desde que el año pasado Pedro Sánchez fue reelegido secretario general, subrayando el hecho de que la moción era posible y debía ponerse en pie con los apoyos de la izquierda y los soberanistas catalanes y vascos, una hipótesis a la que los veteranos barones socialistas se oponían con fiereza. Aunque en el debate hubo opiniones diversas sobre cómo ejercer una oposición con mensaje claro y diferenciado, y cómo modular su intensidad con los apoyos en materias que son compartidas, en general, los integrantes de este think tank de Podemos coinciden en que, toda vez que el Gobierno de Sánchez es una creación a la que la formación morada ha contribuido con la tenacidad desplegada desde el 2016 –y en particular, con su negativa a permitir un gobierno de PSOE y Ciudadanos–, ahora que la opinión pública vive jornadas de arrebatamiento con Sánchez, la formación no quiere repetir errores pasados de la izquierda y aparecer como el aguafiestas: hay que dar tiempo al Ejecutivo y colaborar en los objetivos de programa compartidos, toda vez Podemos se asume como padre intelectual de este cambio. En Podemos es sólido el convencimiento de que tanto el electorado en general como sus votantes en particular entienden la salida de Rajoy como un éxito suyo, tanto o más que de los socialistas. Toca ser pacientes y cooperadores.