Álvaro Pascual-Leone
NEURÓLOGO
Las personas que tienen un proyecto vital, es decir, un objetivo que les trasciende, tienen un mejor funcionamiento cognitivo y una mejor salud en general, según el estudio Barcelona Brain Health Initiative que dirige Pascual-Leone.
Una nueva estrategia terapéutica reduce el tamaño de las metástasis cerebrales y alarga la supervivencia de los pacientes sin producir efectos adversos, según ha revelado una investigación internacional liderada por el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).
La terapia, todavía en fase experimental, se basa en administrar por vía oral un fármaco llamado silibinina. En colaboración con el Institut Català d’Oncologia y el hospital Doctor Trueta de Girona, los investigadores la han ensayado de forma preliminar, y como complemento al tratamiento convencional, en un grupo de 18 pacientes con cáncer de pulmón que habían desarrollado metástasis en el cerebro. Según publicó ayer la revista Nature Medicine, en 13 de los 18 voluntarios (un 72%), la silibinina redujo el tamaño de las metástasis y, en tres de ellos (17%), desaparecieron por completo. El tratamiento cuadruplicó la supervivencia media de los pacientes, que aumentó de cuatro meses en el grupo que no recibió el tratamiento a quince meses y medio en el grupo que sí lo recibió.
Actualmente, los principales tratamientos disponibles para combatir las metástasis cerebrales son la cirugía y la radioterapia, que pueden producir efectos secundarios graves. También existen algunos fármacos, pero sólo son eficaces en dos de cada diez pacientes, informa Manuel Valiente, investigador del CNIO y director del trabajo.
El mecanismo de acción de la silibinina se basa en inhibir la molécula STAT3 en unas células del cerebro llamadas astrocitos. Estas células, que en condiciones normales facilitan el funcionamiento de las neuronas y las protegen de amenazas, se comportan de forma anómala en las metástasis cerebrales: en lugar de proteger al cerebro de los tumores, les ayudan a proliferar. La investigación liderada por el CNIO ha revelado que STAT3 es la pieza central del comportamiento alterado de los astrocitos y que bloquearla puede convertirse en una nueva vía de tratamiento para las metástasis cerebrales, complementaria a los tratamientos actuales.
Aunque la terapia se ha ensayado en pacientes con cáncer de pulmón metastático, los investigadores afirman que puede ser efectiva en metástasis cerebrales derivadas de cualquier tipo de tumor. En estos momentos buscan financiación para realizar un ensayo clínico y así probar la eficacia de la silibinina en un grupo de pacientes más amplio.