Trump cede y ordena no separar a los niños de los migrantes
El presidente de EE.UU. autoriza detener juntos a padres e hijos indefinidamente
La presión ejercida desde todos los sectores de la opinión pública estadounidense ha surtido efecto. El presidente Donald Trump dio ayer su brazo a torcer y ordenó acabar con la política de división de familias en la frontera instaurada en abril. Desde entonces, 2.342 niños han sido separados de los brazos de sus padres cuando intentaban entrar de forma ilegal en el país, una infracción que se decidió tratar por la vía judicial y no sólo administrativa, a costa de dividir familias.
“Tenemos que mantener a las familias unidas”, concedió el presidente. “Tenemos que ser compasivos”, dijo antes de firmar la orden que autoriza la detención indefinida de familias con niños mientras se resuelven los procesos contra los padres. Porque van a seguir presentando cargos criminales contra quien llegue de forma ilegal, recalcó el presidente, que dijo que nunca le gustaron las imágenes de los niños solos. La orden pretende revocar el ‘acuerdo Flores’ de 1997 por el que los menores no pueden ser detenidos más de 20 días. Un juez federal sentenció en el 2017 que el plazo debe aplicarse también a sus padres. La norma firmada ayer, cuya legalidad ya se cuestiona, quiere poner fin a la pasada práctica de “detener y soltar” cumplidos los 20 días, que lleva a que a menudo se pierda la pista de esas personas.
La decisión es un giro argumental importante para Trump, que lleva semanas diciendo que no estaba en su mano acabar con la separación de familias, que no hacía si no aplicar la ley y que “sólo el Congreso” podía arreglar la situación, una forma de presionar a los demócratas para que apoyen alguna de las reformas migratorias que preparan los republicanos. Hoy se votan dos.
Trump no necesitó firmar ninguna orden ejecutiva para poner en marcha esta política de tolerancia cero, como la defendió en su día el fiscal general, Jeff Sessions. Bastaba con hacer una llamada telefónica, decían sus detractores tanto en las filas demócratas como republicanas, temerosos de que la medida se volviera contra ellos en las elecciones de noviembre.
Una veintena de senadores republicanos habían escrito “alarmados” a Sessions para que “por decencia” encontrara una solución al problema, mientras otros tantos fiscales estatales le advertían que la medida era “contraria a los valores de América”. Trump se podía haber enfrentado no sólo a problemas políticos sino prácticos para seguir adelante con su política de tolerancia cero. Los gobernadores de siete
El papa Francisco, la actriz Natalie Portman y políticos republicanos han protestado contra la separación de familias
estados, entre ellos varios republicanos, habían anunciado que dejarían de enviar o retirarían sus tropas de la guardia de fronteras federal si no se acababa con la práctica. Y las aerolíneas United y American Airlines informaron al gobierno de que no transportarían más menores afectados por esta política.
Entretanto, una colecta en Facebook para recaudar fondos para la principal oenegé de inmigrantes en Texas que pretendía reunir 1.500 dólares lleva captada la cifra récord de cinco millones de dólares. Las donaciones han llegado a entrar al ritmo de 4.000 dólares por minuto. La actriz Natalie Portman, por su parte, ha lanzado una petición online para pedir a los políticos que se posicionen “con firmeza” contra la separación de familias. “Detener, poner niños entre rejas y luego perderlos es cruel e inhumano”, dice.
Las imágenes de niños pequeños solos, encerrados mientras se les busca algún pariente o familia de acogida a la espera del juicio de sus padres, han horrorizado al mundo. “La dignidad de una persona no depende de su estatus como ciudadano, inmigrante o refugiado. Salvar la vida de quienes escapan de la guerra y la miseria es un acto de humanidad”, dijo el papa Francisco. “Lo que ocurre en EE.UU. es inaceptable”, criticó el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; “la forma en que tratamos a los más vulnerables define lo que somos”.