Fira, un motor de Barcelona
Fira de Barcelona se ha consolidado como uno de los grandes motores de la economía de la ciudad y su área de influencia. Acontecimientos como el Mobile World Congress la han puesto en el mapa internacional de las innovaciones en el ámbito de las nuevas tecnología de la comunicación, sin perder por eso el enfoque hacia los sectores industriales, maduros o emergentes, que sustentan la economía catalana. La institución ha sorteado la recesión sin grandes descalabros y ahora se plantea una nueva etapa de crecimiento. Si bien en los años noventa su liderazgo estuvo más que amenazado por la institución madrileña Ifema, ahora es Fira la que marca la pauta, en salones y también en congresos. Una de las claves del éxito, probablemente la principal, ha sido la paz institucional que ha regido desde el año 2000. Ahora, toca renovar los órganos de gobierno y se espera que sus responsables –Generalitat, Ayuntamiento y Cambra de Comerç– estén a la altura, lleguen a acuerdos y mantengan la estabilidad de la institución.