Los taxistas arropan a Podemos en su lucha contra Cabify
La compañía anuncia que interpondrá medidas legales contra el partido político
Cabify dijo que interpondrá medidas legales contra Podemos después de que en el acto de conciliación celebrado ayer en un juzgado de Madrid, la portavoz parlamentaria Irene Montero se ratificara en sus acusaciones contra Cabify sobre una presunta evasión de impuestos en un paraíso fiscal. Montero estuvo rodeada y jaleada por decenas de taxistas de asociaciones como Antaxi, Elite Taxi, Caracol y Taxi Barcelona y dijo que su obligación como cargo público es “estar allí donde se defienden los intereses de España y de los españoles”. El contencioso entre Cabify y Podemos tiene lugar en medio de la batalla que mantienen el sector del taxi y las empresas de VTC.
A la mediación también acudieron por parte de Podemos el secretario de organización y programa, Pablo Echenique, y el fundador y exdirigente del partido Juan Carlos Monedero, además del portavoz de la comisión de fomento de Podemos, Rafael Mayoral, quien dijo que hay “transnacionales con sede en paraíso fiscal que piensan que pueden poner mordazas a los representantes de la soberanía popular”.
Por su parte, el director para Europa de Cabify, Mariano Silveyra, advirtió que si Podemos no rectifica sus acusaciones, estudiará la interposición de una demanda judicial en breve plazo contra este partido político o sus representantes. Silveyra dijo que le “sorprendería” que Podemos rectificara los mensajes que vienen “sufriendo hace ya más de un año” en las redes sociales por parte de dirigentes del partido que, ha dicho, “atentan y atacan” a la plataforma y que “buscan desprestigiar” su reputación.
El fundador de Cabify, Juan de Antonio, recurrió ayer a las redes sociales para dirigir una carta a los líderes de Podemos e invitarles a conocer el modelo de negocio de la firma. Silveyra añadió, ante el juzgado, que Cabify es una empresa española que tributa el 100% en España, si bien la matriz está radicada en Delaware (EE.UU.) condicionada por los inversores norteamericanos iniciales. Según dijo, Cabify facturó en el 2017 en España 70 millones de euros (frente a 17 millones del 2016) con pérdidas de tres millones.