Estreno de Niña Pastori
Niña Pastori, cantante, que presenta ‘Bajo tus alas’ en Jardins de Pedralbes
Entrevista a la cantante que presenta en el Festival Jardins de Pedralbes –en estreno en Catalunya– su nuevo disco Bajo tus alas, un indudable reto para la sanguínea intérprete de San Fernando tras el éxito de Ámame como soy con el que ganó un Grammy Latino al Mejor Álbum de Música Flamenca.
Niña Pastori presenta en el Festival Jardins de Pedralbes –en estreno en Catalunya– su nuevo disco Bajo tus alas (Sony), un indudable reto para la sanguínea intérprete de San Fernando tras el éxito de Ámame como soy con el que ganó un Grammy Latino al Mejor Álbum de Música Flamenca. El próximo miércoles 4 se podrá comprobar, acompañada de su grupo, su estado (22 h).
En su anterior álbum, repasaba cancionero latinoamericano, en este son temas originales. ¿Quién decide estos virajes?
Suele depender, la discográfica, nosotros… sobre todo nosotros. De todos modos si se fija en los diez discos que ya he grabado no hay una continuidad, aunque siempre sea Niña. Me cansa repetir línea.
¿Es un disco de flamenco?
No, no. Es un disco de canciones de Niña Pastori. La gran mayoría son composiciones nuestras y es una obra muy mía, la composición, las melodías y las letras. Y digo nuestras porque son de mi marido [el músico Julio Jiménez “Chaboli”] y mía. Él es el productor, el arreglista y el que le da forma a todo lo que a mí me gusta y no sé hacer.
Cuando hizo Ámame… por primera vez en su carrera contó con colaboradores, como Rubén Blades o Juan Luis Guerra. Aquí ha vuelto a tener invitados como Vanesa Martín o Pablo Alborán. ¿Le ha cogido gusto?
Es una cosa que se suele hacer ahora. Todos los músicos, por decirlo de alguna manera, estamos muy a mano. Hubo un tiempo en que todos íbamos en plan más individual, y ahora, no sé si por las redes sociales o por lo que sea, tenemos más información los unos de los otros. Tu estás de viaje y por tu móvil sabes dónde está Pablo Alborán, en su casa o en Colombia. Las redes sociales han podido tener su parte no tan positiva, pero en este caso sí que lo es.
Usted comentó entonces que nunca había tenido invitados en sus discos por una cuestión de pudor. ¿Ya lo ha superado?
Las colaboraciones son para mí complicadas porque es verdad que te puede gustar ese artista pero no caerte tan bien como persona, o al contrario. Es algo que puede pasar y es un tema delicado, pero a mí también me encanta la experiencia de compartir porque ves otra visión de tu canción, o igual que tú le das algo nuevo, como me pasó con Juan Luis Guerra la vez pasada. Y en esta ocasión me ha pasado con Vanesa Martín, que aunque sea también andaluza su género no tiene nada que ver con el mío ni su forma de interpretar y componer, y cuando interpreta un tema mío ves que está aportando algo nuevo que no te esperabas.
¿El flamenco está viviendo una buena etapa ahora mismo como género, por demanda del público, por interés de las discográficas? Para mí el flamenco siempre está viviendo un buen momento porque el flamenco es pureza y es una música muy profunda, muy de dentro, muy especial, que se distingue del resto. Y para mí siempre hay gente buena que está aportando, que está arriesgando algo, y eso hace que el flamenco sea moderno, aunque sea una música tradicional. Los flamencos investigan, proponen, hacen cosas diferentes con una música que es pura. El flamenco siempre está muy vivo.
Pero también es un género estigmatizado en algunos sectores, por ser machista así como muy tradicional. No lo considero así. La gente se queda muchas veces con una primera impresión. En el flamenco, además, la mujer tiene un papel fortísimo, no ahora, siempre lo ha tenido: cantaoras con renombre, bailaoras legendarias… Quizás apenas haya tocaoras, pero eso también ocurre en otras escenas musicales. Y eso no es una cuestión de machismo. Y yo personalmente nunca me he sentido afectada por mi condición de mujer.
Leyendo las letras de su nuevo disco, ¿qué tipo de mujer cree que se revela?
Pues no lo sé, no sabría decirte, pero sí puedo decir que soy una mujer muy sensible y que adoro lo que hago. Y con este disco me siento moderna y flamenquísima.
¿Qué opina de esas músicas que están arrasando en medio mundo, el reggaetón o las llamadas músicas urbanas?
Siempre que se haga con gusto y conocimiento… Yo no tengo nada en contra del reggaetón bien tocado, bien cantado y bien hecho. Es una música más, como el resto de estilos. Y hasta en el tema de las letras, el que compone ha de tener el sentido común de que lo que nosotros hacemos traspasa y llega a la gente, una gente que te sigue, que te imita, te copia. Y todo el que esté expuesto a grandes masas has de tener bastante cuidado.
¿En España es más difícil vivir de la música que hace unos años?
Es difícil hoy destacar, porque hay mucho en todos los campos. Y mucha gente buena y todo va muy deprisa. El que arranca hoy lo tiene complicado, aunque los principios nunca son fáciles para nadie. Y eso es peligroso porque hasta no hace mucho todo parecía tan fácil que había gente que grababa un disco antes siquiera de formarse como artista. Yo empecé con el directo, y te ibas haciendo artista en contacto con el público, adquiriendo tablas. Y de pronto hubo una época en que iba al revés, y se pudieron ver muchísimos fracasos. Y es de sentido común que primero te tengas que formar en el directo, porque al fin y al cabo ese es tu pan, eso es lo que te va a mantener en el futuro.