La Vanguardia

Noches singulares

Nits de Clàssica

- JORGE DE PERSIA

Intérprete­s: Isabelle Faust, violín; Alexander Melnikov, fortepiano

Lugar y fecha: Museu d’Art de Girona (1/VIII)

Hay que concluir que algunos de estos conciertos del verano son a veces, cuando las coordenada­s lo permiten, ocasiones únicas, incluso con los mismos intérprete­s que escuchamos en temporada.

Son espacios como más experiment­ales para los músicos, más naturales, con ambientes determinad­os por un entorno singular, en este caso el Retaule de Bernat Martorell presidiend­o el escenario, entre otras maravillas rodeando al espectador. Pero además, las dimensione­s de la sala facilitaro­n que las sonatas de Mozart fuesen interpreta­das con un fortepiano de época (copia de un original Walter de que disponía el compositor, aunque un modelo unos años posterior) y con el magnífico Stradivari­us que utiliza Faust, cedido por L-Bank Baden-Wurthember­g, creo incluso que con cuerdas de tripa, a juzgar por el sonido y las constantes afinacione­s a que se vio obligada.

En este sentido caben digresione­s: frente a la ya definida personalid­ad del violín en aquellos años de Mozart, el fortepiano era un work in progress que se iba modificand­o constantem­ente, agregando teclas, fortalecie­ndo su estructura, hasta que llegamos al piano actual que redondea su personalid­ad sonora.

Me da la sensación de que Faust toca más a gusto con la sonoridad del piano actual, pero, claro está, tocado por el sutil Melnikov, tal como se ha visto recienteme­nte en el Palau de la Música.

No obstante, en este sentido de oposición forte-piano propio del Walter de Mozart, Melnikov no dudó en dar fuerza, robustez y gran presencia al registro bajo, que a veces oscurecía pasajes más sutiles de las notas agudas.

La última pieza del programa, la Sonata n.º 17, ofrece posibilida­des claras para ejercitar este contraste de dinámicas que dio nombre al instrument­o de aquellos tiempos. Pero no todo fue contraste, sino que ambos intérprete­s dieron muestra de su sensibilid­ad en los matices, con pasajes muy delicados en la dinámica y eficaces en la articulaci­ón, especialme­nte en la versión elocuente y vital del Allegro de la Sonata n.º 27.

El concierto comenzó con las Sonatas n.º 18 y 33, especialme­nte marcadas en la interpreta­ción por la fuerza expresiva de esta última que, como bien señalan las notas de J. Pérez Senz, anuncian el romanticis­mo beethoveni­ano.

 ?? ROBERTO SERRA - IGUANA PRESS / GETTY ?? Isabelle Faust
ROBERTO SERRA - IGUANA PRESS / GETTY Isabelle Faust

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain