‘Ongi etorri’ contra la turismofobia
El País Vasco lanza una campaña de bienvenida al visitante para contrarrestar los mensajes negativos
El estándar publicitario en el sector es captar visitantes. La idea, en este caso, contradice la ortodoxia y se dirige a los que ya están en suelo vasco: quiere agradecerles su presencia y desearles una estancia agradable. Frente a las pintadas de “Tourist go home”, los carteles pegados en los corazones de las capitales vascas e incluso el boicot a un tren que recorría La Concha repleto de turistas, el País Vasco lanza el mensaje de “Bienvenidos”. Es la respuesta a la turismofobia que el pasado agosto sacudió el territorio.
El brote fue inesperado y tuvo su epicentro en San Sebastián. Las juventudes de la izquierda abertzale, Ernai, encabezaron unas protestas que tuvieron como diana el crecimiento descontrolado del turismo y la precarización del sector, un aspecto que las instituciones admiten que se debe mejorar. “Vuestro turismo, la miseria de los jóvenes”, fue el lema de la manifestación que en plena Semana Grande recorrió el centro de la capital guipuzcoana. La imagen, como los mensajes estampados en la Parte Vieja o la Agencia de Turismo repleta de pintura roja tras un ataque, quedó grabada.
Para contrarrestar este movimiento, el Gobierno vasco ha puesto en marcha la campaña Ongi Etorri (Bienvenidos), en la que la palabra se apodera de carteles, marquesinas y banderolas en los ocho idiomas más empleados por los visitantes: castellano, catalán, gallego, francés, inglés, alemán, italiano y portugués. No sólo en San Sebastián, sino en los principales destinos del territorio. “Euskadi no manda a los turistas a su casa, es un país hospitalario donde tenemos una oferta variada que da cabida a todos”, destacó el consejero de Turismo, Alfredo Retortillo, en la presentación.
El Ejecutivo autonómico lamenta que los mensajes “negativos” del pasado año presentaron al País Vasco como un “destino poco acogedor y masificado”, un nuevo cliché que quieren borrar después de convivir durante tantos años con el inmenso hándicap del terrorismo y ahora que, sin violencia, el turismo en Euskadi ha aumentado exponencialmente. De 2,3 millones de visitantes en 2006 al récord de 3,6 millones en 2017. Y va a más: en el primer semestre de este año se contabilizaron 65.000 turistas más que en el mismo periodo del anterior. Pero Retortillo rechaza que Euskadi esté cerca del tope como destino turístico.
Aunque ya se han borrado algunas pintadas contra el turismo, agosto es el mes más conflictivo, con las fiestas de las tres capitales como foco de protestas. Ante la polémica del pasado verano, todas ellas han aprobado una nueva normativa para regular los pisos turísticos y, a la iniciativa de bienvenida, San Sebastián ha sumado “Love San Sebastián, live Donostia”, un decálogo para el “respeto y la convivencia” orientado al turista que recoge consejos como “cuidar el descanso” de los donostiarras, “convivir con los vecinos”, “ayudar a mantener la limpieza” de la ciudad o utilizar el transporte público. Mensajes en una doble vía para acabar con el “Tourist go home
Las capitales vascas han aprobado normativas para regular mejor los pisos turísticos