Problemas y soluciones
La falta de ley y orden que se observa en Barcelona, especialmente en verano; y el ofrecimiento de diálogo y soluciones políticas al conflicto catalán que ha caracterizado el arranque de la presidencia de Pedro Sánchez.
EL presidente Pedro Sánchez hizo balance ayer de los dos meses que lleva al frente del Gobierno de España y de la situación del país y aprovechó para dejar claras las diferencias políticas respecto de las exigencias que anteayer le planteó Pablo Casado sobre la situación en Catalunya. Su anuncio de que no abrirá más vías judiciales con Catalunya supone un claro punto de inflexión respecto de la política que llevó a cabo el gobierno Rajoy de judicializar el conflicto catalán. Que el presidente del Gobierno crea que se trata de una crisis política que se debe abordar desde la política es un paso positivo. Además, huyendo de la confrontación, Sánchez le quita nuevos argumentos a Carles Puigdemont.
Sin descartar totalmente la posible aplicación de nuevo del artículo 155, como le pidió Pablo Casado, el presidente Sánchezp refirió destacar las bondad es de restablecer mecanismo s de diálogo como la comisión bilateral Estado Gen er ali tat como medio para normalizarlas relaciones institucionales. La visión de Sánchez es realista. Sabe que la solución del problema catalán requerirá mucho tiempo y por ello cree poder tener argumentos para intentar convencer al independentismo de votar no por una secesión sino por una reforma estatutaria o constitucional. Por ello defiende que todo posible acuerdo que se lleve a votación debe representar al 80% de la sociedad catalana mientras que, a su juicio, lo que plantea el independentismo no representa ese porcentaje.
Sánchez avanzó que el rey Felipe VI asistirá a los actos de homenaje a las víctimas de los atentados de Barcelona y de Cambrils. “El Rey y el Gobierno van a ir”, afirmó, dejando clara la intención del Ejecutivo socialista de arropar al Monarca el día 17. La Generalitat ya ha sido informada y habrá que ver cuál será su reacción después de que hace un tiempo el president Torra anunciara que la institución catalana boicotearía los actos a los que asistiera el jefe del Estado.
Aparte del tema catalán, de la rueda de prensa de Sánchez cabe destacar el anuncio de la creación de un mando policial único en las fronteras y en el estrecho de Gibraltar que centralizará todas las operaciones para frenar la llegada de pateras y la inmigración ilegal. Para el presidente ello demuestra la implicación de su Gobierno frente al drama migratorio, en contraposición con el gabinete anterior del PP. Otro tema objeto de polémica las últimas semanas, la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos, tendrá que esperar hasta septiembre tras la oposición de la familia y problemas jurídicos. “Si hemos esperado 40 años, podemos hacerlo unos días más”, dijo Sánchez. Pese a su fragilidad parlamentaria, el presidente está dispuesto a aprobar los presupuestos y a agotar la legislatura. Habrá que ver si los hechos confirman sus deseos.